Por Joseline Ayala
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Aunque los alcaldes insisten en que el Congreso debería aprobar las reformas a la Ley de Presupuesto 2017, este tema ha creado inconformidades con al menos 40 alcaldes que se oponen a las acciones de presión realizadas por la Asociación Nacional de Municipalidades (Anam) liderada por Edwin Escobar.
Los alcaldes que se oponen a las acciones de presión realizadas desde hace varias semanas por los integrantes de la Anam aseguran que si bien es necesario que se retire el candado, que según ellos les imposibilita ejecutar el presupuesto, no apoyan las constantes visitas y las acciones de asistir al pleno a gritar a favor del cambio como lo han hecho los demás jefes ediles.
“Es un grupo de alcaldes distinto a la Anam, nosotros creemos que no se han hecho las acciones que corresponden de la forma adecuada, creemos que subirse al palco a gritarle a los diputados no es la forma, creemos que lo correcto es hacer los cabildeos necesarios para obtener el apoyo necesario”, dijo el alcalde de Palencia, Guadalupe Alberto Reyes.
Agregó que la forma de lograr el apoyo debe ser a través del dialogo y no a través de los insultos y que lucharán por recuperar los recursos, pero que los diputados merecen respeto y no buscando el enfrentamiento.
Por el tema, Escobar dice que se perderían más de 176 millones de quetzales destinados a infraestructura, salud y educación si no se aprueban los cambios mientras que el analista político Christians Castillo asegura que el tema va más enfocado en intereses particulares.
“Los alcaldes del país solicitamos a los diputados que aprueben las reformas antes del 15 de julio para evitar perder ese dinero que está destinado a las comunidades para proyectos que ya están programados, pero que no se pueden llevar a cabo”, dijo Escobar.
INTERESES PARTICULARES
En cambio Castillo asegura que históricamente los alcaldes se han acostumbrado a ser negligentes en cuanto a la ejecución presupuestaria en procesos de adjudicación y que el tema va más bien enfocado en intereses políticos y particulares.
“Los alcaldes son bastante negligentes en cuanto a la ejecución presupuestaria y a los procesos de adjudicación, muchos de ellos no tienen las capacidades técnicas para realizar esos procesos y para respetar las leyes que ya existen, mucho menos de cumplir con los tiempos que establece el presupuesto en cuanto a ejecución”, indica Castillo.
Por su parte, Abelardo Medina, analista económico del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) indicó que si bien los alcaldes necesitan flexibilidad financiera para ejecutar los recursos, no deben saltarse los procesos que comprueban que estos están siendo bien utilizados.
Concluye que los alcaldes están pidiendo que se retiren los candados, pero no están haciendo nada para darle transparencia al gasto que realizar y que esto más bien indica que están interesados en negocios o asuntos personales que los intereses de sus municipios.