POR REDACCIÓN LA HORA
lahora@lahora.com.gt
Tras la fuga de Marixa Lemus, alias La Patrona, y días después, de Wilfredo González Hernández, ambos señalados de liderar estructuras criminales, los lectores de La Hora criticaron la debilidad del Sistema Penitenciario y la corrupción que impera en todo el sistema de justicia.
Miriam Monterroso: ¿Cuándo van a entender que a los reos no hay que sacarlos? Ellos no deben de ser atendidos en hospitales generales con la demás gente. Ya les deberían de haber creado una casa de salud solo para ellos, que los atiendan médicos de esos que no ponen atención y que dicen venga mañana.
José Cano: De qué sirve que los cuerpos antisecuestros arriesguen su vida si los guardias de presidios los dejan escapar. Realmente hay que entender que un guardia que apenas gana para comer, lo mandan a custodiar a un secuestrador que ha juntado mucho dinero, lo va a comprar. Qué desgracia.
González Arturo: El sistema presidiario, los jueces corruptos sobornables son aliados de los criminales extorsionadores, sicarios y pandilleros. Ellos perpetúan el círculo maldito del crimen… Allí tienen una y miles de pruebas…gobierno criminal…terrorista.
Vinicio De León: No cabe duda de que no hay seguridad en ningún lado, se fugan de los lugares que parecen más seguros, como lo son los cuarteles militares, ya no digamos de los hospitales.
OA HS: La fuga de esta señora La Patrona es sospechosa, una vez que el recinto carcelario donde se encontraba estaba ubicado dentro de un cuartel militar. Mmm… ¿curioso verdad? ¿Juzgue usted si únicamente los guardias del Sistema Penitenciario tuvieron culpa?
Wilson Noe Monzón Ramos: Y al que fungía como director de presidios le están dando tiempo que se vaya del país también. Después van a andar como que son bobos con órdenes de captura buscándolo.
José María Menchú Pocop Caen: Solo los de fuera como el exgobernador de Veracruz, pero los de aquí solo caen si roban una gallina.
Ximenej: Al menos Q100,000.00 habrá pagado Marixa Lemus, la fugada, a cada uno de los que la ayudaron a escaparse. Si a su abogangster y, además, exmilico, le encontraron U$58,000 (+\- Q435,000) que ya no pudo lavar, es de imaginar que la recompensa que ofrecen por su recaptura, no es ni muy grande o atractiva.
Ramiro Silva: El sistema de Gobierno, el podrido sistema de justicia y penitenciario, todos, toditos, todos son los que tienen a Guatemala hecha mierda. Perdonen la expresión, incluyendo al CACIF que es cómplice del sistema actual. Esas cárceles VIP deben ser cerradas, clausuradas y sus «distinguidos» huéspedes enviados a las diferentes cárceles comunes, vistiendo de anaranjado, sin derecho de visitas y comiendo el rancho que ahí se sirve… ¿por qué tanta preferencia? ¿acaso no son vulgares delincuentes? ¡YA BASTAAAA!
Edmundo Alvarez Vásquez: Explicaciones absurdas, justicia super manoseada, contactos militares, dinerales de por medio. ¿Qué hacía en una cárcel VIP una asesina sentenciada a 94 años de prisión? ¿Qué? Luego, de repente, al Mariscal Zavala cualquiera puede entrar, de oficio (llevar comida, hacer visitas clientelares, de casos etc.), de paisano, con uniforme y sin él ¿y qué frutas hacen los temidos, defensores de la patria?
Nena Nena Nena: Para empezar ¿qué hacían en el hospital? ¿No habían quedado que ya no pondrían en peligro a otros pacientes? ¿Llevando allí a los delincuentes? ¿Qué va a seguir haciendo este hombre ahora en libertad?
César Suárez: En Guatemala es el paraíso de los delincuentes, buena atención en las cárceles y con comida gratis, ellos son los que mandan dentro de las instalaciones, los cabecillas definen a donde les mandan si son capturados; tienen privilegios de muchas clases, etcétera.
Froim Kachler: El sistema carcelario no solo es obsoleto, sino que ya es una vergüenza nacional. Es un nido de víboras sin el Dragón que los controle. Qué pena.
Levy Bertran: Todos los sistemas están corruptos en sus diferentes niveles, luego de la partida de la CICIG, a reventar de nuevo la piñata.
Miguelito Recinos: Esas no son cárceles, son auto hoteles, la dirección de presididos no las puede controlar. Una cárcel es para cumplir una pena, no para vivir cómodamente, así es la justicia. No se robe un poco de pan, unas limosnas de la iglesia, ya lo sentencian varios días en la cárcel. Sea presidente, vicepresidente, magistrados, ministros, diputados, directores que se roban millones y se la pasan felices en Mariscal Zavala o Matamoros.
