Por Douglas Gámez
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La continuidad del apoyo estadounidense al trabajo de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), confirmada por Rex Tillerson, el Secretario del presidente Donald Trump, genera mayor presión sobre las autoridades guatemaltecas y su compromiso con la lucha contra la corrupción, aseguran analistas y excancilleres.

“A nivel de Gobierno significa un compromiso. El nivel de presión, de responsabilidad y de hacer las cosas bien tienen que incrementarse, es decir, los ojos siguen estando puestos sobre Guatemala y no podemos decir que lo que estamos haciendo es suficiente”, indicó el analista político Renzo Rosal.

Rosal explicó que el mensaje de Tillerson demuestra que la inestabilidad de la región siempre será una preocupación para los gobiernos de EE. UU. sin importar que la administración recaiga en el Partido Republicano o el Demócrata.

El experto recordó que los problemas políticos, económicos y sociales del Triángulo Norte influyen en temas que también son interés de Estados Unidos, como la migración, el narcotráfico y la lucha contra el terrorismo.

“Que un Secretario de Estado mencione de forma temprana y explícitamente su apoyo a la CICIG implica que la nueva administración reconoce el grado de importancia que tiene Guatemala, por la ingobernabilidad y la institucionalidad resquebrajada que es una preocupación constante para Estados Unidos”, dijo el analista.

DISUELVE INTENCIONES

El excanciller y analista del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (Ipnusac), Edgar Gutiérrez, calificó como positivo el mensaje del Secretario de Trump. A su criterio, desmiente las especulaciones de un posible retiro del apoyo estadounidense a la CICIG con la llegada del nuevo Gobierno.

“Es un espaldarazo y un anuncio que ayuda a estabilizar al país políticamente. Había mucha especulación sobre si la nueva administración se desentendería de la CICIG y si habían cabildeos en su contra, por aquí y por allá. Es positivo para las autoridades y para la población interesada en la lucha contra la corrupción”, afirmó.

POSICIÓN NORMAL

El exministro de Relaciones Exteriores, Gabriel Orellana, refirió que el respaldo a la CICIG evidencia que las nuevas autoridades de EE. UU. entienden que Guatemala no puede mantenerse en el camino actual, ya que podría representar una amenaza para su seguridad nacional.

Sin embargo, enfatizó que aún es prematuro para tener una visión clara de la política exterior del presidente Donald Trump.

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