POR KIMBERLY LÓPEZ
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El titular de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), Iván Velásquez, manifestó su preocupación ante el riesgo de que no sean aprobadas las reformas constitucionales para el sector justicia. Según Velásquez, el avance que ha logrado la discusión de estos cambios a la normativa constituyen una «oportunidad histórica» que se perdería de no aprobarse en el Congreso y precisamente ese es el interés de algunos sectores que intentan bloquearlas.
“Si no se aprueban las reformas se habrá perdido una oportunidad histórica, se perderá una evolución en la justicia”, manifestó el comisionado y titular de CICIG, en el marco de la discusión de las reformas constitucionales que está en manos de los diputados del Legislativo.
Según Velásquez, quienes hasta ahora han pedido un proceso más largo de discusión buscan la forma de detener la aprobación de estos cambios.
A esta postura se sumó la de la analista Carmen Aída Ibarra, integrante del movimiento Pro Justicia, quien aseguró que si no son aprobadas las reformas se perdería la oportunidad más cercana que el país ha tenido de emprender una reforma de fondo al sistema de justicia.
Según Ibarra, en años anteriores ha habido apenas algunos intentos o parches a la Constitución.
“Si no se logra ahora, van a pasar muchos años antes de que se pueda plantear de nuevo las reformas, es ahora cuando más cerca estamos de lograrlo”, explicó.
Helen Mack, activista y directora de la Fundación Myrna Mack, también respaldó los comentarios de Velásquez e indicó que las reformas deben ser discutidas, analizadas y dialogadas en el Congreso para aclarar ambigüedades pero no se debe alterar en función de otros intereses.
Hay preocupación por la forma en que quedó redactada, genera preocupación sobre cómo quedó establecido el Consejo Nacional de la Justicia y solo es cuestión de ajustarlo en materia de redacción, aseguró.
La activista hizo especial mención del papel que debería jugar en este proceso la ciudadanía, de la misma forma en que sucedió durante las movilizaciones del año pasado.
“Las reformas son un momento histórico e ignorarlas es ignorar todo el esfuerzo que la ciudadanía ha hecho en la lucha contra la corrupción”, dijo Mack.
