POR KIMBERLY LÓPEZ
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Analistas consideran que concesionar la Terminal de Contenedores Quetzal (TCQ) sin respetar el proceso legal establecido, como lo propone el Ejecutivo, tendría graves consecuencias para el país, pues generaría una imagen de corrupción e impunidad a nivel internacional, lo que afectaría las inversiones.

Ayer el presidente Jimmy Morales insistió en la aprobación de la concesión sin licitación a la empresa holandesa APM Terminals: “Hoy estamos a punto de perder una terminal portuaria (TCQ), que además de ser la puerta marítima de Guatemala más importante en el Pacífico, es una inversión sumamente importante para el país”, advirtió a través de sus redes sociales, en un mensaje dirigido a la población.

En las últimas semanas Morales ha enfatizado en su preocupación por la pérdida de la inversión ya realizada si el Congreso no aprueba la iniciativa que presentó el Ejecutivo, y en la cual se crea una figura legal que permite concesionar la terminal, sin apego a la Ley de Contrataciones del Estado.

Sin embargo, analistas contradicen al mandatario, ya que consideran que las consecuencias de la concesión serían aún más dañinas, pues se proyectaría una imagen de aceptación a irregularidades, ilegalidades y falta de certeza jurídica.

Según el analista político independiente, Ricardo Barreno, las consecuencias para la imagen del país a nivel internacional se evidenciarían en factores económicos.

“No se debe dejar de considerar el riesgo hacia la economía, por ejemplo, en inversiones extranjeras”, indicó Barreno. El analista explica que aspectos como la fortaleza legal de los procedimientos en el país son determinantes para que extranjeros vean a Guatemala como un lugar factible para la inversión.

“Al considerar un caso como el de TCQ y al estudiar que estos mecanismos resultaron lesivos, me parece que incidirá en la toma de decisiones para la inversión extranjera”, explicó.

DAÑARÍA LA CREDIBILIDAD

Por su parte, el analista político Jorge Wong opinó: “Si se entrega TCQ a favor de APM es más que seguro que la imagen del país a nivel internacional sufriría un desgaste, más del que ya ha sufrido hasta ahora por actos de impunidad a nivel de Gobierno”.

Wong señala que sería muy negativo para el país que se hiciera el procedimiento de la forma en que lo impulsa el Organismo Ejecutivo, cuando existen otras formas de resolverlo.

“Hay procedimientos para solucionarlo y llama la atención el por qué querer aprobar esa concesión”, cuestionó el entrevistado.

“La imagen del país, en términos generales, se vincularía a la falta de certeza jurídica, aceptación de corrupción e impunidad. Se tendría la percepción de que pueden hacerse negociaciones debajo de la mesa y comprar voluntades”, indicó.

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