POR VIRGINIA CONTRERAS
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Tras el decreto 5-2016 publicado ayer por el Organismo Ejecutivo que declaraba Estado de Prevención, en el que el gobierno dio marcha atrás, analistas señalaron que, entre otras medidas, contenía una intención de trasfondo al prohibir las manifestaciones y concentraciones ciudadanas.
Para Helen Mack, activista en derechos humanos y directora de la Fundación Myrna Mack, el decreto 5-2016 contenía una intención de trasfondo, pues a su criterio no existía relación entre la evacuación de una comunidad en riesgo, con limitar la libertad de expresión, sino más bien, considera que la línea iba dirigida para evitar las protestas que se han dado tanto en el Congreso, como en la Plaza de la Constitución.
De acuerdo con Mack, esta situación se debía al reclamo constante de la ciudadanía en contra del presidente Jimmy Morales y el vicepresidente Jafeth Cabrera.
“El reclamo de la población se debe a la traición del Presidente, en cuanto a que pedían que no existiera la misma clase política y, recientemente contra Cabrera, en donde la opinión pública dice que es peor que Morales”, dijo la activista.
En los incisos i y j del artículo 6 del decreto se mencionaba: Disolver por la fuerza, sin necesidad de conminatoria alguna, cualquier grupo, reunión o manifestación pública en la que se hiciere uso de armas o se recurriere a actos de violencia y prohibía a los órganos de publicidad o difusión “todas aquellas publicaciones que a juicio de la autoridad contribuyan o inciten a la alteración del orden público”.
En tanto, Mario Polanco, director del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), señaló que las intenciones del decreto eran el reflejo de la mentalidad de los asesores presidenciales que están vinculados con el Conflicto Armado Interno y en especial con el periodo en que se violaron gravemente los derechos humanos.
Por otro lado, Polanco destacó que se prestaba para cerrarle la puerta a la Ley de Contrataciones, ya que buscaba adquirir por medio de compras por excepción la cantidad de bienes que se requirieran en las distintas secretarías y ministerios.
Polanco explicó, que de no haberse dado marcha atrás, a las dos semanas de vigencia se hubieran podido evidenciar los actos de corrupción que marcarían el destino de este Gobierno.
Este día el presidente en funciones, Jafeth Cabrera, aseguró que decidió dejar sin efecto el Decreto para “evitar malos entendidos”, luego de que el Ejecutivo fuera atacado por el descontento de la población tras la acción tomada, que fue justificada por las lluvias.