POR KIMBERLY LÓPEZ
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Las autoridades guatemaltecas dudan de la validez del informe presentado por la Organización de Estados Americanos (OEA) respecto a las investigaciones realizadas por la muerte del menor guatemalteco Julio Alvarado, en manos de autoridades beliceñas. En términos generales, solicitan una ampliación a dicho informe, así como medidas para evitar que paramilitares vigilen la zona de adyacencia entre Belice y Guatemala.

Gabriel Aguilera, embajador de Guatemala ante la OEA, entregó una carta al Secretario General de la OEA, Luis Almagro. En dicho documento se expresa que para el gobierno el informe en mención es incompleto en varios puntos y genera muchas dudas.

Según Aguilera, el informe no brinda los elementos suficientes para iniciar un proceso que lleve a los responsables para que se deduzcan responsabilidades. “Se queda corto, hay debilidades y falencias”, agrega.

Por ese motivo, la petición realizada por el gobierno guatemalteco a los expertos que realizaron el informe es que amplíen sus consideraciones sobre puntos específicos del mismo.

Al recibir la solicitud de Guatemala, Almagro ofreció considerar el contenido para dar alguna respuesta.

PARAMILITARES VIGILAN FRONTERA

Por aparte, el canciller Carlos Raúl Morales expresó su preocupación por la existencia de organizaciones civiles que patrullan armadas en el territorio que está en administración de Belice y en áreas vecinas en la zona de adyacencia.

“Están recibiendo órdenes de personal militar y beliceño, eso se llama personal paramilitar”, denunció Morales.

A partir de esa preocupación, indicó el Canciller, se extiende la petición para que la OEA en su carácter de garante se pronuncie al respecto e investigue, para no permitir que existan paramilitares en esa zona. “El derecho internacional debe cumplirse», agregó.

En esa línea, Aguilera explicó que en el incidente que dio muerte al menor guatemalteco participaron civiles armados que pertenecen a una Organización No Gubernamental de conservación y desarrollo, que estaban integradas dentro de una patrulla militar.

“Ellos fueron los que dieron muerte al menor y eso es motivo de condena, es de preocupación que paramilitares actúen en la zona de adyacencia”, condenó el embajador.

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