POR REDACCIÓN LA HORA
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Mario Rodolfo Contreras Díaz, quien está señalado en el Caso Cooptación del Estado de haber invertido y administrado Q200 millones a través de un grupo de empresas ficticias para los supuestos líderes de la organización: Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti, rechazó ante el juez haber incurrido en lavado de dinero.
Contreras aseguró que no fue contador de Baldetti, como señaló el Ministerio Público, sino que fue contratado para hacer una auditoría en el Grupo Estrella y el periódico SIGLO.21, propiedad de la exvicemandataria.
Fue entonces cuando conoció a Salvador Estuardo González Álvarez, alias “Eco”, y Juan Carlos Monzón Rojas, presuntos miembros de la estructura criminal, dijo.
El sindicado negó haber administrado de forma irregular fondos ilícitos. “No compré nada para ninguna de las personas sindicadas, entre estas Otto Pérez Molina, Roxana Baldetti y Monzón. No coloqué productos financieros (…) es una mentira asquerosa en la que se me está metiendo a mí, dañando a mi persona y a mi familia”, expresó.
Asimismo, rechazó haber conseguido testaferros para las empresas de cartón de Baldetti, reunidas en el Grupo Estrella. Según Díaz Contreras las empresas sí tenían actividad económica y los representantes legales allegados a él fueron nombrados para que pudieran hacer gestiones para sus clientes en la Superintendencia de Administración Tributaria.