POR REDACCIÓN LA HORA
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Bajos niveles de escolaridad, inseguridad, infraestructura débil y falta de institucionalidad son algunas de las consecuencias de la corrupción estatal en los últimos años, señalan analistas.

Son esas consecuencias las que a su vez mantienen a Guatemala en el rezago económico, de forma que, según el Banco Interamericano de Desarrollo, mientras el resto de América Latina incrementa su clase media, en Guatemala se amplían los sectores en pobreza y pobreza extrema.

Un reportaje de La Hora, publicado en las páginas 6 y 7 de esta edición, demuestra que mientras los Gobiernos de turno utilizaron fondos públicos para enriquecerse de forma ilícita, la población a la que estaban destinados tales recursos se empobreció hasta llegar a constituir más del 50 por ciento de la población.

El Ministerio Público y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala revelaron la corrupción del Partido Patriota, pero han señalado que los negocios ilícitos con el erario no comenzaron con dicho Gobierno.

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