POR VIRGINIA CONTRERAS
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Según datos del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), aproximadamente seis mil guatemaltecos fallecen al año como consecuencia de enfermedades causadas por el tabaquismo, incluyendo el 10 por ciento que corresponde a fumadores pasivos, así como quienes trabajan en centros cerrados donde, en teoría, no se permite fumar.
Esa institución, que se basa en estudios realizados a partir de estadísticas de centros asistenciales, además, señala que 27 personas, de 10 a 70 años, han sido atendidas en la red hospitalaria a nivel nacional, del 2015 a la fecha por cáncer de pulmón.
En ese sentido, el patólogo Miguel Garcés, en el marco de la celebración del Día mundial sin tabaco, indicó que quienes consumen este producto tienen el 30 por ciento de probabilidad de obtener algún tipo de cáncer y un 25 por ciento de tener una enfermedad cardíaca.
Además, destacó que el tabaco es más adictivo que la mariguana.
ACCIONES PARA EVITAR EL CONSUMO
De acuerdo con el experto, en el transcurso de 10 años se ha tratado de implementar diferentes acciones para evitar que se siga consumiendo este producto, las cuales han ido de la ley de impuestos al tabaco, que pretende aumentar el precio de este vía impuestos, puesto que está comprobado que al subir el importe un considerable número de personas deja de fumar, beneficiando en su mayoría a aquellas de bajos recursos.
Señaló que en el 2014, en el Congreso se estaba estudiando la ley de pictogramas, que establecía la colocación de gráficos en las cajetillas de cigarrillos, no solo para concientizar a los individuos sobre los daños que causa fumar, sino también penalizar la inducción a la adicción.
Manifestó que esta Ley fue aprobada en esa entidad, pero aclaró que no fue la que se propuso, sino “una que favoreció a la Tabacalera”.
Asimismo, añadió que se pretende prohibir toda publicidad, patrocinio y propaganda, para evitar el uso de vallas o cualquier tipo de medios de comunicación que difunda esta información.
Por último, Garcés enfatizó en que el Estado tiene la obligación de educar a la población en el daño que produce el consumo del tabaco, algo que al momento no se ha cumplido.
NUEVA POLÍTICA
En tanto, para contrarrestar este mal, María Antonieta Solórzano, Directora de tratamiento y rehabilitación de la Secretaría Ejecutiva de la Comisión contra las Adicciones y el Tráfico Ilícito de Drogas (SECCATID), explicó que se trabaja en una nueva política que dé respuestas actualizadas a la problemática, ya que existe una nueva demanda de consumo.
Dentro de las acciones a tomar se encuentra volver a implementar los espacios libres de humo.