POR GRECIA ORTÍZ
gortiz@lahora.com.gt

Rony Palacios, de la Red Nacional por la Defensa de la Soberanía Alimentaria en Guatemala (Redsag), explicó en una entrevista para La Hora las consecuencias del abuso descontrolado de los recursos hídricos del país, en el contexto de la marcha por el agua, en la cual participan decenas de comunidades de todo el país para denunciar el desvío, la contaminación y la sobre explotación de los mantos de agua.

¿Qué consecuencias tiene el desvió de afluentes de agua en Guatemala?
Precisamente en la Costa Sur y en la parte norte del país, en donde están establecidas las plantaciones grandes de monocultivos como la caña de azúcar y la palma africana, básicamente se está desviando gran cantidad de agua de los caudales de estos ríos a estas plantaciones, que están ocasionando daños que reducen drásticamente el caudal. Hemos visto que hay algún tipo de contaminación por algunas sustancias tóxicas que llegan a parar a los ríos, algunas de una forma más premeditada. Pero la falta de medidas de gestión del riesgo van a parar a los ríos, estamos hablando de el bagazo de la caña que está en proceso de descomposición de compostaje que lamentablemente por falta de control de riesgos llega a parar a los ríos, las comunidades han reportado una contaminación muy grande en la muerte de los ríos. Al final todo esto llega a parar al mar y tiene efectos en la vida marina, por ejemplo en los manglares, muchos organismos tienen sus nidos en estos lugares. Hay algunas que no reciben agua y dependen de esos ríos para regar sus cultivos, para consumo directo de las personas.

¿Existe un estimado de cuántos cuerpos de agua han sido desviados de su cauce?
Por ahora tenemos el río que está en Suchitepéquez, que es uno de los ríos que hemos estado sabiendo noticias de las comunidades, que reportan daños; pero de igual manera está el río La Pasión, que recientemente se reportó con altos grados de contaminación. Seguro hay muchos más casos que recientemente se han dado a conocer por parte de las comunidades afectadas. Esto es un atentado con el derecho de la alimentación de las personas. Hay cierta represión de las empresas, algunos líderes nos han compartido su temor de denunciar el tipo de atropellos de contaminación, debido a que pueden ser objetos de represión, de hecho han manifestado que los han visitado cuando hacen algo en contra de esto. Debería de haber un diálogo una discusión responsable con la población afectada y los contaminadores para poder llegar a algunos acuerdos, para reducir algunos acuerdos.

¿Quiénes resultan más afectados de toda esta situación?
Básicamente se afecta la vida de los ríos. Usted sabe que hay crustáceos, hay peces, hay algas, microorganismos en estos sistemas acuáticos. Se sabe que son muy ricos en nutrientes y por lo mismo hay una gran diversidad de vida que se ve afectada porque hay una pérdida significativa de oxígeno en las aguas.

¿Existe desatención en el tema del agua?
Definitivamente se han presentado las denuncias públicas y también legales del caso, pero hasta ahora el Ministerio Público no ha emitido opinión con respecto a los daños ambientales. Se sabe que se les pidió un dictamen a varias entidades de gobierno como el Ministerio de Salud, el Ministerio de Ambiente, y no conocemos los resultados, pese a que se han ido a solicitar. No sabemos los dictámenes técnicos que se hubieran emitido como producto de la denuncia que se hizo en el MP, de nuestra denuncia y de las comunidades. Ante esa falta de respuesta, nosotros creemos que ya pasaron más de tres años, tiempo en el cual ya debiésemos tener una respuesta. Entonces, suponemos que hay una omisión cómplice entre los que están ocasionando esta contaminación y estas instituciones del Estado que no están actuando como deberían de actuar.

¿Por qué se hace necesaria una ley de aguas?
Ha habido una gran discusión en el país de hace años de este tema. Desde la visión de los pueblos indígenas, el pensamiento de cosmovisión no ha considerado necesario que se regulase el uso del agua, porque es un bien patrimonio colectivo, tal y como lo dice la Constitución, que no debería de ser privatizable, que no debería ser contaminable, lo debiésemos cuidar la población en general, ante todo este tipo de amenazas que está sufriendo el agua. También la población en general está contribuyendo, es necesario que se regule la llegada de las aguas negras a los ríos. Sabemos que se usan como drenaje natural, debería regularse todo ese tipo de daños que se les está ocasionando a los ríos. También es un daño que necesita ser evitado disminuido, obviamente, el tema de los desvíos. Hay demasiados sectores involucrados, deberíamos tener un Congreso bastante objetivo, con todo este tipo de expectativas, debiese haber una razón bastante científica apegada a nuestra cultura que pudiera regular el agua en nuestro país.

¿Existen sanciones para quienes incurren en prácticas de contaminación y desvíos?
Seguramente que sí las hay porque está la Ley de Medio Ambiente. Hay sanciones económicas de cárcel, pero lamentablemente no se aplica, hay sectores de económicos de poder que tienen demasiada influencia, sobre todo de esta aplicación de leyes.

“Básicamente se afecta la vida de los ríos. Usted sabe que hay crustáceos, hay peces, hay algas, microorganismos en estos sistemas acuáticos”.
“Por ahora tenemos el río que está en Suchitepéquez, que es uno de los ríos que hemos estado sabiendo noticias de las comunidades, que reportan daños; pero de igual manera está el río La Pasión, que recientemente se reportó con altos grados de contaminación. Seguro hay muchos más casos que recientemente se han dado a conocer por parte de las comunidades afectadas. Esto es un atentado con el derecho de la alimentación de las personas”.
RONY PALACIOS REDSAG

Artículo anteriorGuatemaltecos dan vida después de la muerte
Artículo siguiente“La Línea”: Aniversario de un caso y de un año sin reformas