POR MARIELA CASTAÑÓN
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José Joel Siguantay Gómez, de19 años, fue capturado anoche señalado junto a dos jóvenes por la muerte de un hombre en la zona 2. Siguantay fue detenido el sábado por manejar una motocicleta robada y portar varios teléfonos celulares sin factura, pero fue dejado en libertad por orden judicial.
Según la Policía Nacional Civil (PNC), a través de las cámaras de videovigilancia se identificó a Siguantay Gómez, así como a Gerson Wagner Morales Ruano y Wilmer Alexander González Cabrera, como presuntos sospechosos de la muerte de Julio César Frese Arévalo.
El incidente violento ocurrió en la 7ª. calle y 13 avenida de la colonia Ciudad Nueva en la zona 2, donde también fue herido otro joven que fue trasladado a un centro asistencial público.
Tras el asesinato, las autoridades detuvieron a Siguantay, Morales y González en la zona 6; los vinculó con el crimen porque supuestamente aparecen en las imágenes del atentado. Habrían sido detenidos cuando viajaban en la camioneta P-974 BTW marca Chevrolet, color gris y negro, con reporte de robo.
UN DÍA ANTES
Un día antes del crimen en la zona 2, fue detenido Siguantay, quien fue señalado por viajar en una motocicleta con reporte de robo y por portar siete teléfonos celulares sin factura y marihuana.
De acuerdo con la Policía, el señalado fue dejado en libertad por orden judicial.
EN CORRECCIONAL
Por otro lado, según los reportes policiales, Siguantay estuvo en el centro correccional Las Gaviotas en el 2013, sindicado por el delito de portación ilegal de arma de fuego.
La Hora buscó información en el Sistema Penitenciario (SP) para conocer si esta persona ha sido recluida en la alguna cárcel, pero se informó que no aparece con ese nombre.
De acuerdo con los archivos policiales, el señalado también utiliza el nombre de Raúl Antonio Morales; cuando fue detenido intentó engañar a los policías fingiendo que era menor de edad.
EVITAR LA CÁRCEL
En una ocasión, Enrique Leal, exsubsecretario de Reinserción y Resocialización de Adolescentes en Conflicto con la Ley Penal de la Secretaría de Bienestar Social (SBS), explicó a La Hora que los jóvenes detenidos regularmente mienten en su identidad y edad para confundir a las autoridades, y evitar ser recluidos en una cárcel.
“Estoy presumiendo que hay un 5 o 10 por ciento de menores de edad que mienten al sistema de justicia, sobre su edad y su nombre. Es el problema de todo el sistema y lo tenemos que discutir en una mesa técnica”, dijo el funcionario en aquella ocasión.
Uno de los casos documentados fue el de un joven que aparentemente tenía 14 años, que fue detenido el 4 de abril de 2013, señalado de asesinar al piloto y al ayudante de un bus en la zona 13.
En esa ocasión, el joven ofreció varias versiones, incluso a los medios de comunicación; al siguiente día modificó la verdad al ser entrevistado por personal de la SBS; se descubrió que era reincidente y tenía más edad.
