POR VIRGINIA CONTRERAS
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El 25 y 26 de febrero se llevarán a cabo las siguientes reuniones para continuar buscando solución al problema que se suscitó por la desviación del río Madre Vieja, en Escuintla, según lo refirió Juan Alfredo Ramos, auxiliar de la Procuraduría de Derechos Humanos.

De acuerdo con el delegado de la PDH, en la misma se prevé realizar una verificación ocular para el aforo del afluente, en donde participarán vecinos, los alcaldes de Nueva Concepción y Tiquisate, así como representantes de los ingenios azucareros y la empresa de Palma Africana y el Gobernador del lugar.

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