Guatemala's former dictator Efrain Rios Montt leaves court in a stretcher as he's comforted by his daughter Zury Rios Sosa after he faced charges of genocide and crimes against humanity in Guatemala City, Monday, Jan. 5, 2015. The court had ordered the 88-year-old to appear after rejecting a defense motion that he was too frail to attend. Rios Montt was convicted for the massacre of thousands during his 1982-83 regime in what was considered a historic 2013 ruling. But his 80-year sentence was later overturned and a restart to the trial ordered. (AP Photo/Moises Castillo)

Por SONIA PEREZ D.,

GUATEMALA
Agencia AP

Un tribunal fijó para el 16 de marzo el inicio de un juicio especial contra el general retirado Efraín Ríos Montt, en su cuarto intento por juzgarlo por los delitos de genocidio.

Luis Rosales Marroquín abogado defensor del general Ríos Montt, de 89 años, dijo que el tribunal ha fijado la audiencia de inicio de debate «a pesar que existen varios recursos pendientes».

En el juicio no estará presente el acusado. Será a puerta cerrada y solamente con la presencia de la parte acusadora y de la defensa. De ser condenado, Ríos Montt podría enfrentar una sentencia que cumpliría en su casa o en un hospital debido a su deteriorada condición de salud.

Héctor Reyes, uno de los abogados de las víctimas, dijo que existen varios recursos «entre ellos varios amparos interpuestos incluso por nosotros, pero ninguno tiene un amparo provisional que detendría el inicio del debate».

Médicos declararon a Ríos Montt incompetente mental debido a enfermedades y su avanzada edad, en julio de 2015.

Ríos Montt es acusado de los delitos de genocidio y contra los deberes de humanidad por la muerte de 1.771 indígenas ixiles a manos de soldados del ejército bajo su mando, cuando fungió como jefe de estado de facto (1982-1983).

El juicio contra Ríos Montt es el cuarto intento, dos anteriores fallaron debido a recursos legales de por medio y uno más fue anulado.

En 2013, un tribunal condenó al exjefe de Estado a 80 años de prisión pero el juicio fue anulado por fallos en el proceso. Junto al exdictador también se juzgó y absolvió a Rodríguez Sánchez, su exjefe de inteligencia.

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