POR CLAUDIA PALACIOS
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La desecación del río Madre Vieja, debido al desvío de su cauce por parte de empresas productoras de palma africana y caña de azúcar, provocó un conflicto con los vecinos de los municipios de Nueva Concepción y Tiquisate, en Escuintla. Ayer, el alcalde de la primera comunidad, acompañado de dos párrocos locales y varios comunitarios liberó un brazo del río que fue desviado por la empresa Agroindustrias Hame, productora de palma de aceite.

Juan Ramos, auxiliar de la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) en Escuintla, indicó que el conflicto surgió a raíz de que el río Madre Vieja, que antiguamente fluía por su caudal, dejó de hacerlo por los desvíos realizados por las agroindustrias, lo que afectó a los pobladores del lugar.

Ante esta situación, la PDH inició una mesa de diálogo con comunitarios de Nueva Concepción y miembros de la empresa privada, a requerimiento del alcalde de dicha jurisdicción, la cual pretendía llegar a un acuerdo entre las partes.

Según explicó Ramos, en la reunión, la población solicitó la liberación total del río, y las empresas aceptaron hacerlo, pero a través de un proceso paulatino, a medida se encontraban formas de sustituir la fuente de agua.

“La semana antepasada se había acordado que se iba a verificar si las empresas estaban cumpliendo con lo mismo y nos constituimos al lugar de los desvíos y efectivamente estaban haciendo algunos trabajos de drenaje. Estuvo el alcalde, los párrocos y los pobladores; más sin embargo, ellos vieron que los trabajos no eran como ellos esperaban y hablaron con el maquinista y le pidieron que rompiera una de las afluentes que alimentaba una entrada de agua para las fincas, y empezaron a romper, procurando que el río siguiera su cauce normal”, explicó el auxiliar de la PDH.

Esta acción provocó el rechazo de las empresas, quienes señalaron que sin el agua no podían continuar sus cultivos, y por lo mismo, podrían verse obligados a despedir trabajadores.

Así mismo, intervino el alcalde de Tiquisate, ya que los trabajos realizados por los vecinos de Nueva Concepción se llevaron a cabo sin el consentimiento de ese municipio, por el cual también pasa el río.

Ante el conflicto, la PDH solicitó al Gobernador de Escuintla que lidere las negociaciones, para lograr encontrar una solución que beneficie a todas las partes.

La Hora intentó comunicarse con Agroindustria Hame, sin embargo, un operador de la empresa indicó que los encargados de proporcionar información al respecto, solo podían hacerlo de lunes a viernes. Así mismo, se intentó contactar a la alcaldía de Nueva Concepción, pero no respondieron a las llamadas efectuadas.

La próxima reunión se llevará a cabo el próximo lunes.

FALTA LEY DE AGUAS
Rafael Maldonado, del Centro de Acción Legal Ambiental y Social de Guatemala (CALAS) indicó que el desvío de ríos es una acción violatoria de la Constitución, que establece que el agua es de dominio público. La acción incluso podría constituir un delito menor, aseguró, ya que el Código Municipal lo prohíbe.

Maldonado y Ramos, coinciden en que este caso evidencia la falta de una Ley General de Aguas que debería obligar al Congreso a debatir su aprobación.

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