POR REDACCIÓN LA HORA
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En agosto de 2013 comenzó la edición del “Suplemento Universitario” de La Hora, en el que se abrió un espacio para que jóvenes estudiantes de diferentes universidades y con formas de pensamiento expusieran su punto de vista sobre problemas nacionales y plantearan propuestas para contribuir con el país. Un año y medio después, la experiencia ha resultado exitosa y los jóvenes cuentan con un medio de expresión.

La Hora pone a disposición de jóvenes estudiantes de diferentes carreras y de diferentes universidades, un espacio para que puedan plasmar sus opiniones e ideas sobre diversos temas, y a la vez, planteen propuestas que contribuyan a la construcción de un mejor país.

Esa dinámica ha marcado desde sus inicios al Suplemento Universitario, que se concibió en la Dirección de este vespertino como un aporte más al diálogo nacional, a través de espacios gratuitos de opinión para jóvenes destacados en sus estudios de alto nivel.

“Sin lugar a dudas, la juventud tiene muchas cosas que decir hoy en día. Los jóvenes hemos llegado a un punto donde el querer comunicarnos y transmitir nuestras ideas es elemental. Las personas que no opinan, no generan cambios, por lo tanto nosotros como juventud guatemalteca, tenemos el deber de generar ese cambio mediante la exteriorización de pensamientos y opiniones”, indicó Astrid Lima, una de las estudiantes que recurrentemente publica en el Suplemento Universitario.

“El suplemento Universitario del Diario La Hora ha sido para mí una manera de expresión muy enriquecedora. Es claro que las redes sociales en la actualidad permiten expresarnos, pero para los que aún consideramos especial e inspiradora la palabra impresa, los suplementos de este tipo son una gran oportunidad de expresión”, destacó.

No se trata únicamente de escribir sino más bien de escribir con trasfondo, el cual es promover ideas y cambios para los problemas actuales de nuestro país. Es un hecho que gran parte de los universitarios de hoy en día, en unos cuantos años estarán en puestos públicos y privados de vital importancia dentro del país, por lo que el interés y opinión de estas generaciones en temas de actualidad es elemental. Solo las personas que conocen los errores del pasado podrán llegar a esos puestos a realizar los cambios para no continuar en el círculo vicioso de errores y pasos en falso, indicó.

A criterio de Abner Jonatan Cottóm Peña, otro estudiante que escribe en La Hora, “el aporte de las y los jóvenes que mensualmente nos sumamos al espacio del Suplemento Universitario, resulta ser enormemente necesario para comprender las nuevas capacidades e interpretaciones de las realidades que como generación vivimos y entendemos. No solo se trata de debatir o de aprender algún dato nuevo, sino también de comparar las diferencias y similitudes entre distintas formas de pensar bajo un mismo tema sociopolítico, comprendiendo las diversas posturas que nacen de nuestras realidades cotidianas y entendiendo que hay diferencias aún entre las diferencias, pero sobre todo que existimos en situaciones similares que cada vez nos acercan más al otro y a su humanidad”.

“Es eminentemente conveniente no solo escucharnos entre jóvenes urbanos o rurales, con o sin estudios universitarios, de diversos espacios, lenguas y condiciones sociales, sino además el construir esas propuestas lo más colectiva y ampliamente posible para implementarlas logrando que sean institucionalizadas y posean una estructura permanente. La gerontocracia, el machismo, clasismo, sexismo y la heteronormatividad no son criterios ni categorías excluyentes a la hora de proponer y efectuar soluciones. Escucharnos y dialogar es la forma más efectiva de hacer política”, agregó.

“Es un hecho que la iniciativa del Diario La Hora en la promoción de este tipo de iniciativas es vital. El hecho que los medios de comunicación de nuestro país se interesen en promover la participación periodística de la juventud universitaria es un gran paso de inclusión y de cooperación”.
Astrid Lima

“Este vespertino se ha convertido en esa plataforma donde podemos encontrarnos, reconocernos en las mismas condiciones culturales y hablar sobre qué es lo que sentimos y pensamos”.
Abner Jonatan Cottóm Peña
USAC

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