POR REDACCIÓN LA HORA
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La Asociación y el Colegio de Farmacéuticos y Químicos de Guatemala manifestó su rechazo a la decisión de la Corte de Constitucionalidad (CC), que obliga a las farmacéuticas a realizar estudios sobre todos los medicamentos no nuevos -genéricos- que se introduzcan en el mercado guatemalteco.

El vicepresidente del Colegio de Farmacéuticos, Arturo Letona, explicó que la oposición a la sentencia constitucional se debe a que ésta obliga a los laboratorios de medicamentos a hacer estudios sobre las moléculas de las medicinas genéricas, para identificar si éstas son funcionales en los pacientes.

La CC declaró inconstitucional el numeral 13.2 del Reglamento para el Control Sanitario de los Medicamentos y Productos Afines, el cual eliminaba la exigencia de estudios que comprobaran la seguridad y eficacia de los medicamentos para la autorización de productos no nuevos.

El expediente 1569-2015 de la CC declaró con lugar la acción de inconstitucionalidad promovida por la empresa farmacéutica J.I. Cohen, con referencia al numeral del reglamento que habla sobre el otorgamiento de la autorización comercial de un producto no nuevo.

El escrito indica que el numeral 13.2 no debe exceptuarse, el cual trata sobre la presentación de estudios o información para demostrar la seguridad y eficacia del producto farmacéutico.

Sin embargo, el representante de la Asociación y el Colegio de Farmacéuticos y Químicos de Guatemala dice que por más de 30 años se ha comprobado que los productos genéricos son igual de funcionales que los medicamentos «de marca», incluso para personas tratadas por diabetes, cáncer, VIH sida y problemas renales.

Para Letona, la decisión constitucional solo beneficia a la J.I. Cohen que es una proveedora de medicamentos de marca, ya que esa farmacéutica es la única que tendría el «monopolio del comercio de medicinas en Guatemala».

En palabras sencillas «esta sentencia quiere que se repitan todos los estudios genéricos, los cuales pueden costar desde un cuarto hasta medio millón de dólares, además que se llevan años en hacerse. Para hacer estos estudios se tendrían que hacer pruebas con personas que no están enfermas y eso significa repetir el calvario que sucedió cuando se hizo el experimento con las pruebas de sífilis», dijo Letona.

La presidenta de la Asociación de Farmacéuticos, Martha Tánchez, coincidió con Letona y agregó que esta resolución solo agudizará la crisis medicinal, ya que los pacientes que utilizan medicamentos genéricos tendrán que comprar los originales los cuales seguramente serán impagables.

Entre tanto, el ministro de Salud Pública, Mariano Rayo, dijo que si la sentencia de la CC no se resuelve en el corto plazo, Guatemala podría ser el único país en el mundo donde se prohíbe el registro y comercialización de medicinas genéricas. Por esa razón hará todo lo que esté al alcance «para solventar el asunto y eso puede pasar por acciones legales, reglamentarias, normativas y de supervisión».

ACCIÓN Y DEFENSA

La farmacéutica J.I. Cohen en un comunicado divulgado ayer, pidió al Presidente de la República y a la Procuraduría de los Derechos Humanos, no permitir la derogación de la sentencia avalada por la CC, que tiene como objeto garantizar a los consumidores de productos farmacéuticos seguridad y eficacia en sus medicinas.

La acción a la que se opone el Colegio y Asociación de Farmacéuticos y Químicos de Guatemala fue planteada por J.I. Cohen en contra de un segmento del reglamento para el Control Sanitario de los Medicamentos y Productos Afines, en abril del 2015.

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