POR SAIRA RAMOS
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El 2015, está próximo a finalizar y la Autoridad para el Manejo Sustentable de la Cuenca del Lago de Amatitlán (AMSA), no pudo recuperar los Q22.8 millones que entregó a la empresa israelí M. Tarcic Engineering Ltd., encargada de ejecutar un proyecto de saneamiento a las aguas de Amatitlán.
El equipo de comunicación del director ejecutivo de AMSA, Marlon Valladares, indicó que el proceso de recuperación de los fondos del Estado está en los juzgados llevando su trámite correspondiente después que Tarcic planteó varios amparos buscando la revocatoria del reintegro solicitado por esa autoridad.
La polémica de la limpieza del lago de Amatitlán inició cuando en una citación en el Congreso, uno de los representantes de la Cuenca informó que la contratación de la fórmula a la empresa israelí fue ordenada por la exvicepresidenta Roxana Baldetti, la cual el Ministerio de Salud Pública determinó que era “agua con sal”.
Para el Ministerio Público (MP), el líquido que se aplicaría a las aguas del lago el cual estaba valorado en Q137.8 millones es a “primera vista, una estafa clara al Estado”.
