POR WALESKA HERNÁNDEZ
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La jueza Jisela Reinoso, quien es señalada de enriquecimiento ilícito, recuperará su libertad luego de ser beneficiada con medidas sustitutivas por el juez segundo de Primera Instancia Penal, Darwin Porras.
En una audiencia que se realizó esta mañana, Porras accedió a otorgar medidas sustitutivas a la jueza, a cambio de una fianza de Q150 mil, que según indicó la procesada, pagarán esta misma tarde.
Al terminar su comparecencia y luego de conocer la resolución del juez, Reinoso comentó sentirse agradecida con Dios por recuperar su libertad, luego de ochenta días en prisión.
Además, aseguró que se sintió protegida por las demás reas del Centro de Detención Santa Teresa. Esto, en referencia a las amenazas que supuestamente le hiciera el abogado de la exvicepresidenta Roxana Baldetti para que dejara la celda que compartirían.
De acuerdo con la defensa de la sindicada, las circunstancias por las que su patrocinada fue enviada a prisión preventiva cambiaron a partir de que la Corte Suprema de Justicia la separó del cargo de jueza y luego de que terminó la fase de investigación en su contra.
La audiencia se llevó a cabo a puerta cerrada, como es la política del juez Porras, pese a que no fue decretada ninguna reserva en el caso.
ANTECEDENTES
Dando continuidad a una denuncia anónima, el tres de febrero pasado, el Ministerio Público (MP), junto con la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), presentaron una solicitud de antejuicio en contra de la entonces jueza cuarta de Primera Instancia Penal.
Los delitos que le imputan son enriquecimiento ilícito, lavado de dinero e incumplimiento de deberes, por no haber actualizado su declaración patrimonial jurada desde el 5 de marzo del 2004.
La investigación preliminar que presentó el MP indica que la sindicada adquirió una vivienda con un valor superior al que su nivel de vida e ingresos le permitían. El costo de la misma asciende a Q.2 millones 357 mil 439.
Según la fiscalía, Reinoso pagó Q.775 mil 982.90 como enganche. El resto sería pagado en abonos de mil mensuales, por 20 años, y cada julio se depositaría una cuota extraordinaria de Q.20,000.00, para cancelar Q.32,000.00 por año.
“En el estudio financiero preliminar elaborado por esta Comisión, se destaca que para el pago del enganche la jueza debitó de sus cuentas Q.442,078.44, el resto del enganche correspondiente a Q.333,904.46 no provino de movimientos bancarios, ni se refleja tampoco en las cuentas de su esposo e hija”, consta en el memorial del MP.
Además, la señalan de haber adquirido dos vehículos de lujo que fueron comprados en febrero y mayo de 2014. Para estas transacciones, la sindicada entregó Q.100 mil como pago inicial de cada uno, haciendo un total de Q.200 mil que pagó al contado, y dejando un saldo de Q125 mil.