POR VIRGINIA CONTRERAS
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De acuerdo con el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), el fenómeno del Miño alcanzará su mayor anomalía hacia finales del año y principios del 2016.

César George,  meteorólogo del Insivumeh,  detalló que de persistir esta situación, no se descarta que para la época seca del próximo año se tengan temperaturas altas, que podrían favorecer la proliferación de incendios forestales y podría repercutir en un inicio irregular en las lluvias en algunas regiones en el país.

Por su parte, David de León, portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, señaló que las lluvias y la variabilidad del clima que se ha suscitado a nivel nacional también son provocadas por este fenómeno, puesto que las condiciones que se han presentado este mes son características de los meses de septiembre y octubre.

A decir del portavoz, se esperaría que para el 2016 haya un 90% de probabilidades de que las condiciones se continúen dando.

CANÍCULA 2015

Distintos estudios del Insivumeh informaban que a partir de mayo de este año se podría presentar una canícula prolongada, la cual ocasionaría una crisis alimentaria como sucedió en agosto de 2014, que afectó a Baja Verapaz, Chiquimula, El Progreso, Jutiapa, Chimaltenango, Huehuetenango, San Marcos, Totonicapán, Zacapa, Quiché, Santa Rosa, Retalhuleu, Sololá, Guatemala, Jalapa y Suchitepéquez.

La misma se caracterizaría por la predominación del calentamiento hacia el área del Pacífico, lo que provocaría una considerable disminución de las lluvias en gran parte de Centroamérica.

Más de 300 mil familias a nivel nacional se vieron afectadas derivado de ello, ya que la ausencia de lluvias ocasionó la pérdida de las cosechas, las cuales sirven para su subsistencia alimentaria. La mayoría de familias de las comunidades utilizaban el maíz y el frijol para autoconsumo, por lo tanto, las pérdidas provocadas por la canícula en estos cultivos, incrementó la inseguridad alimentaria.


ALBERGUES

La Secretaría Ejecutiva de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Se-Conred), activará 81 centros que podrían funcionar como albergues a nivel nacional, luego de que el boletín oficial emitido por el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología –Insivumeh-, indicara que la temporada de descenso de temperatura iniciará en noviembre y se prevé finalice en marzo del próximo año.

Se esperan atender a más de 10 mil personas en toda la temporada, especialmente en aquellos centros que funcionarán en el Altiplano del país.

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