POR MIRIAM HERNÁNDEZ
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La recusación es un recurso al que todos los participantes de un proceso legal tienen derecho. En esencia es una ley que evita el abuso de autoridad y la comisión de injusticias por juicios parciales; sin embargo, al ser utilizado de forma maliciosa, puede convertirse en una herramienta de impunidad y retrasar procesos por meses.

Varios funcionarios públicos, señalados de actos de corrupción por el MP y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala han logrado detener los procesos de antejuicio en su contra. Las recusaciones sumadas a los antejuicios pueden prolongar procesos indefinidamente.

Los hermanos Manuel y Edgar Barquín, vinculados a una red de lavado de dinero y financiamiento ilegal de partidos políticos, detuvieron el antejuicio en su contra por cuatro meses al solicitar que el magistrado Freedyn Fernández se separe del caso, argumentando que antes de ser juez fungió como fiscal y por lo mismo puede actuar de manera parcializada.

Luego de la Corte Suprema de Justicia rechazó la recusación, Manuel Barquín interpuso una nueva, que aún no ha sido conocida por el pleno.

Mario Cano, abogado defensor de la exvicepresidenta Roxana Baldetti, se presentó esta mañana al juzgado de Extinción de Dominio solicitando una recusación contra el juez Marco Antonio Villeda, quien ordenó el embargo de los bienes de su defendida.
C
ano argumenta, sin especificar detalles, que el juez Villeda infringió varias leyes en el proceso de inmovilización de bienes de la exvicepresidenta.

Así mismo, César Calderón, abogado de Adolfo Vivar, exalcalde de Antigua Guatemala, recusó al juez Miguel Ángel Gálvez, aduciendo que el juez emitió opinión durante varias audiencias.

Ramón Cadena, director de la Comisión Internacional de Juristas para Centroamérica (DCIJC) opina que muchas recusaciones se plantean de mala fe con el propósito de buscar la impunidad.

El analista comenta que estas estrategias constituyen litigio malicioso y que cuando son injustificadas son útiles para ganar más tiempo y conseguir que los sindicados puedan abandonar la prisión preventiva, o en otros casos, para conseguir que el juez sea cambiado por uno favorable a sus intereses.

Para Javier Monterroso, exasesor del MP, algunos abogados utilizan la recusación como una forma de alargar el proceso. “Se tergiversa la figura y se convierte en un mecanismo para alargar procesos”, comentó.

¿EN QUÉ CONSISTE LA RECUSACIÓN?
Artículo 128 de la Ley del Organismo Judicial: las partes tienen el derecho de pedir a los jueces que se excusen y el de recusarlos con expresión de causa, en cualquier estado del proceso antes que se haya dictado sentencia. Si el juez acepta como cierta la causal alegada, dictará resolución en ese sentido y elevará las actuaciones al tribunal superior para que dentro de cuarenta y ocho horas resuelva lo procedente. En caso de declararla con lugar, remitirá las actuaciones al que debe seguir conociendo. Juez Luis Patán Piché obstaculizó antejuicio en su contra por medio de una recusación planteada contra el pesquisidor.

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