POR MANUEL RODRÍGUEZ
mrodriguez@lahora.com.gt
Luego que el ministro de la Defensa, William Mansilla, solicitó al juez Miguel Ángel Gálvez, autorizar la salida de Roxana Baldetti del Centro Médico Militar y trasladarla a un hospital del Ministerio de Salud Pública, Julio Figueroa, director del Hospital General San Juan de Dios, dijo que dicho nosocomio no cuenta con la capacidad para atender a Baldetti debido al constante desabastecimiento que se registra de insumos y medicamentos en distintas áreas aunado a la poca inversión presupuestaria que no les permite atender de buena forma al resto de pacientes.
Según el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), la exvicepresidenta podría pasar hasta ocho días más internada, debido a sus padecimientos de salud.
En tanto, Adrián Chávez, analista en Salud del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos, consideró que los centros asistenciales del Estado no se encuentran en condiciones para dar un buen trato a los pacientes, y esa situación deriva en buena medida de la corrupción interna y externa, que debilita los presupuestos asignados al sostenimiento de la red hospitalaria nacional.
De esa cuenta, el analista mencionó también que ninguna cárcel civil está en condiciones de garantizar las condiciones mínimas de protección de los derechos humanos de las personas y que al final Roxana Baldetti está poniendo al descubierto la precariedad del sistema de hospitales y presidios, de la que en parte, su Gobierno fue responsable.
Por último, titular de la cartera salubrista, Pablo Werner, explicó que es difícil proveer las condiciones mínimas de seguridad para la exvicepresidenta en caso sea ingresada a la red hospitalaria pública.
“No estamos en las condiciones de otorgar comodidades a esta paciente porque debe ser tratada como cualquier otro guatemalteco y tampoco garantizamos la seguridad de la paciente ante cualquier intento de fuga o de atentados personales”, explicó el funcionario.
