CLAUDIA PALACIOS
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El MP está ahogado financieramente
Replicar la actividad de la FECI en el resto de fiscalías, es un reto muy importante para cambiar el sistema
La Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) es, en materia operativa, el legado más importante de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) para el Ministerio Público (MP). La “fiscalía élite”, como la llamó Thelma Aldana, la artífice de los casos que han conmocionado a país, sobrevivirá al fiscal general de turno y al mandato de la comisión en la lucha contra la corrupción. Sin embargo, no podrá seguir sacudiendo el sistema si actúa de forma aislada, ¿podrán otras fiscalías acompañar su labor?
¿Qué importancia tiene la CICIG en el país?, preguntó La Hora Departamental a Thelma Aldana, en junio del 2015. “Para mí es muy importante. Es vital porque nos está dejando una fiscalía de élite, que sola después tendrá que seguir luchando contra la corrupción, contra aparatos clandestinos de seguridad incrustados en el Estado y las estructuras criminales del Estado. Esa es para mí la función básica de FECI, cuando no esté la CICIG lo tendrán que hacer solos, ese es el gran reto.”, respondió.
Contrario a lo que muchas personas creen, los personajes detrás de los casos de alto impacto, no son investigadores extranjeros de la CICIG, sino fiscales del MP. Fiscales que han hecho su carrera en la institución y que fueron designados para conformar el equipo de la FECI. La CICIG apoya las actividades investigativas de los fiscales, brindando asesoría y apoyo técnico.
La FECI (anteriormente denominada Unidad Especial de Fiscalía adscrita a la CICIG –UEFAC-) fue creada en septiembre del 2008 con el objetivo de investigar aquellos casos de alto impacto que encuadren en el mandato de la CICIG, es decir, los casos en los que se vean involucrados cuerpos ilegales de seguridad y aparatos clandestinos de seguridad (CIACS).
Gerson Sotomayor, del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales, destacó que la coordinación entre la FECI y la CICIG, es importante porque facilita la transferencia de capacidades de una entidad a la otra. “Al final esto es lo que se busca, que el Ministerio Público adquiera las capacidades técnicas necesarias para combatir a los CIACS por sí mismo”.
LOS FRUTOS DEL TRABAJO COORDINADO
En los últimos cinco meses, desde el 16 de abril en que desmantelaron la estructura de defraudación aduanera La Línea, el MP y la CICIG han dado un golpe tras otro a la impunidad, desnudando así una institucionalidad cooptada por los CIACS.
Helen Mack, de la Fundación Myrna Mack, señala que a diferencia de otras investigaciones, las más recientes han tocado a sectores de gran poder político y económico, llegando a alcanzar al mismo binomio presidencial.
De acuerdo con Mack, esta revelación del nivel de corrupción del Estado tuvo como consecuencia la organización de la indignación ciudadana, expresada en las manifestaciones que exigen reformas legales y cambios estructurales.
La CICIG parece ser el antídoto para la impunidad; sin embargo esto no pasa de ser una simple apariencia y el Comisionado Iván Velázquez lo sabe, la entidad internacional no podrá hacer todo el trabajo.
“La Comisión no tiene capacidad para eso. Dada su limitación, no puede asumir todas las investigaciones que se quisiera… Por eso hemos insistido en ampliar las capacidades del Ministerio Público”, dijo en una entrevista al medio digital Plaza Pública.
De la misma manera, pensar que la FECI podrá acabar con los CIACS por sí sola, es una idea lejana a la verdad, considera Gerson Sotomayor.
Si comparamos la cantidad de casos que podrían ser investigados por la FECI, con la cantidad de recurso humano y técnico que ésta posee, podemos asegurar que, al igual que el resto de fiscalías, es una unidad con muchas limitaciones.
La FECI está conformada por seis agencias fiscales, cada una de las cuales cuenta con un agente fiscal, cuatro auxiliares fiscales y un oficial. Además, la Fiscalía trabaja bajo la supervisión de un Fiscal de Sección Especial y cuenta con la colaboración de un equipo de investigadores de la Dirección de Investigación Criminal del Ministerio Público. El personal total, incluyendo administrativo es de 48 integrantes.
La principal ventaja de la FECI sobre el resto de fiscalías, es que cuenta con el apoyo directo y la asistencia técnica de personal de la CICIG, aunque este también es limitado para la cantidad de trabajo que requiere cada caso. Solo el caso de La Línea, necesitó del análisis de 88 mil 920 sesiones de llamadas telefónicas, 5 mil 906 correos electrónicos y 175 mil documentos.
De acuerdo con datos del MP, la FECI tiene a su cargo 130 expedientes de investigación y el número va en aumento, ya que a partir de una investigación pueden surgir otras.
Uno de los fiscales contra la impunidad, quien no quiso ser identificado, admitió que la carga de trabajo ha dejado la investigación de algunos casos en suspenso.
La “fiscalía élite” se está ampliando para satisfacer la demanda de investigaciones. La fiscal general Thelma Aldana anunció que a partir del mes de noviembre, comenzará a funcionar una sucursal de la FECI que atenderá los casos de alto impacto que se susciten en los departamentos de Quetzaltenango, Totonicapán y San Marcos. Esta nueva Fiscalía funcionará en paralelo con un Juzgado y un Tribunal de Mayor Riesgo.
¿QUÉ SUCEDE CON EL RESTO DE FISCALÍAS?
Sin embargo, la FECI no puede hacer todo el trabajo del MP. Oswaldo Samayoa, analista independiente, señaló que la FECI investiga casos específicos, recogidos dentro del mandato de la CICIG y que su existencia no subsana la necesidad de fortalecer otras secciones del ente investigador, tales como la Fiscalía contra la Corrupción, que por años ha permanecido inoperante.
Gerson Sotomayor calificó como “pasiva” la actitud que han mantenido en los últimos años las fiscalías contra la corrupción, delitos económicos, delitos administrativos, y lavado de dinero, en cuanto a la investigación de casos de alto impacto y sobre todo aquellas que puedan involucrar a personajes vinculados a los sectores de poder político y económico.
Lizandro Acuña, del Instituto de Problemas Nacionales de la Usac (IPNUSAC), subrayó que la demanda de justicia de la población debe ser atendida por el MP, que Constitucionalmente es la institución encargada de la persecución penal.
“Ahora tenemos mayor fiscalización social. La gente está exigiendo resultados y el compromiso tiene que venir de todo el sistema de justicia. No se trata de una reforma de leyes y reglamentos únicamente, sino una voluntad de reestructuración de las instituciones para fortalecer el combate a la corrupción.”, dijo Acuña.
¿QUÉ SE NECESITAN PARA QUE HAYA MÁS FECIS?
El analista del IPNUSAC considera que la ayuda de la CICIG seguirá siendo necesaria para el MP, durante el proceso de fortalecimiento de las capacidades de sus investigadores.
Diego Álvarez, vocero de la CICIG, explicó que el apoyo de la CICIG no se limita a la FECI y señaló el trabajo en conjunto que se ha realizado con algunas fiscalías, como la Fiscalía contra la Trata de Personas, la Fiscalía contra las Extorsiones, la Fiscalía de Delitos económicos, entre otras.
“La coordinación es constante, siempre hay equipos nacionales e internacionales trabajando en cooperación. Así se va dando la capacitación y la transferencia de conocimientos. Nosotros no creemos que tengamos que dar charlas, cursos o seminarios, aunque se han dado también, pero creemos más bien en el trabajo práctico. Durante la investigación y el litigio hay estrategias, líneas de investigación, que se discuten en equipo y así se va dando la trasferencia de capacidades”, indicó.
Helen Mack, señala que la poca importancia que los gobiernos han dado al sector justicia refleja una intención por mantener en impunidad algunos hechos criminales en los que participan miembros del mismo Estado, por lo que también es necesario dotar de más recursos al MP.
Julia Barrera, vocera del MP, destacó el trabajo de la Fiscal General por fortalecer todas las fiscalías, pese a que los fondos asignados por el Congreso para el presente año fiscal, dejan a la entidad con un déficit de Q653.3 millones.
En el mes de marzo, Aldana amplió el personal de la Fiscalía contra la Corrupción y la Fiscalía de Delitos Administrativos.
Además, creó la Fiscalía de Asuntos Internos, con el objetivo de investigar aquellos casos que involucren a miembros del MP.
Javier Monterroso, ex secretario general del MP, considera que la falta de recursos es uno de los principales obstáculos para la persecución penal. “Hay un sinfín de actividades las cuales necesitan de recursos. Esta situación es especialmente grave cuando se llega incluso a afectar el pago de salarios del personal de las instituciones, porque afecta directamente al trabajador, incide en su forma de trabajar, sobre todo en instituciones de persecución penal”, dijo el analista.
El presupuesto designado para le MP de este año dejó sin financiamiento 16 proyectos de innovación y fortalecimiento, entre ellos un proyecto para fortalecer la Dirección de Investigaciones, del MP, un proyecto “fundamental”, según los analistas consultados, ya que otro de las carencias de la institución son los técnicos en investigación criminal.
Monterroso además, coincide con el resto de analistas, en cuanto a la falta de voluntad de algunos fiscales para “jugarse” por sus casos. Esta actitud, considera el analista puede deberse a distintos motivos, entre ellos, presiones externas o el miedo a tocar sectores poderosos e influyentes.
CICIG, UN APOYO
La Ley otorga al MP la función de investigar y ejercer la acción penal. Por esta razón y contrario a lo que muchas personas creen, la CICIG no investiga casos, sino que se limita a apoyar las actividades investigativas de fiscales del MP, brindando asesoría y apoyo técnico.
Con el fin de investigar los casos de alto impacto, dentro del mandato la CICIG, el 1 de septiembre de 2008, se creó la FECI, (anteriormente denominada Unidad Especial de Fiscalía adscrita a la CICIG –UEFAC-)
Los casos que conoce la FECI son designados por el Fiscal General y el Comisionado contra la Impunidad en Guatemala. Actualmente esta sección tiene alrededor de 130 expedientes a su cargo, según información del MP.
COMPOSICIÓN DE LA FECI
La FECI está compuesta por:
a. Un Fiscal de Sección Especial
b. Seis Agencias Fiscales integradas por:
b.1. Un Agente Fiscal
b.2. Cuatro Auxiliares Fiscales
b.3. Un Oficial de Fiscalía
c. Un Equipo de Investigadores de la Dirección de Investigación Criminal del Ministerio Público.
d. El personal total, incluyendo administrativo es de 48 integrantes.
