POR CLAUDIA PALACIOS
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La Sala Primera de Apelaciones confirmó a José Eduardo Cojulún, titular del juzgado Undécimo de Primera Instancia Penal, como juez contralor del caso denominado Bufete de la Impunidad; sin embargo, el togado no podrá seguir a cargo del proceso penal, ya que el órgano jurisdiccional se convertirá en un juzgado especializado en extorsiones.
La recusación, interpuesta por los abogados de dos acusados mantuvo el caso estancado desde junio. Por esta razón, Roberto Molina Stalling, hijo de la juez Marta Sierra de Stalling, no ha prestado primera declaración.
De acuerdo con uno de los fiscales del caso, el expediente deberá regresar a la Sala, una vez el juez se haya excusado para que ésta nombre un nuevo juez contralor.
