POR REDACCIÓN LA HORA
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El juez Miguel Ángel Gálvez resolvió dictar auto de prisión preventiva a la exvicepresidenta Roxana Baldetti, quien ya fue ligada a proceso por los delitos de asociación ilícita, caso especial de defraudación aduanera y cohecho pasivo y emplazó al Sistema Penitenciario por tres días para que habilite los espacios en la cárcel Santa Teresita y traslade a la exvicemandataria a esa prisión para mujeres.
El togado decidió que la exfuncionaria guarde prisión preventiva para que la sindicada no utilice sus influencias para procurar impunidad o que huya del país.
Asimismo cuestionó la legalidad del acuerdo que dio vida al Cuartel Matamoros como centro preventivo para hombres y mujeres, por lo que emplazó al SP habilitar en tres días las instalaciones de Santa Teresita para que la exvicemandataria guarde prisión en ese lugar.
El Ministerio Público (MP) así como el abogado de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) pidieron que se le dictara medida preventiva a la exvicepresidenta, por existir riesgo de fuga.
El MP argumentó que Baldetti tiene pasaporte italiano y que Guatemala no tiene un convenio de extradición con Italia.
Mientras que su abogado, Mario Cano, señaló que al existir arraigo, no es necesaria la prisión preventiva para su defendida.
Gálvez resolvió que la exvicemandataria guarda prisión preventiva para garantizar que la sindicada no utilice sus influencias para procurar impunidad o que huya del país.
El propósito de la prisión preventiva es que el MP pueda realizar las investigaciones sin limitaciones al conocimiento de la verdad, dijo el juzgador.
De acuerdo con Gálvez, dentro de la estructura «La Línea» hay 46 detenidos pero hay 18 personas con órdenes de captura pendientes.
La suerte de la exvicemandataria dio un giro de 180 grados con la decisión del Juez B de Mayor Riesgo, ya que dejará la cárcel especial que se le habilitó en el Cuartel de Matamoros y en adelante guardará prisión preventiva como muchas otras mujeres sindicadas en causas penales.
En las últimas semanas trascendieron informaciones que daban cuenta de un trato preferencial para Baldetti en el proceso de captura, los traslados y encarcelamiento.
A diferencia de otras mujeres, tras su captura la exvicemandataria fue trasladada en un automóvil especial, enviada a una cárcel con comodidades, resguardada por un importante contingente de policías y no fue engrilletada en la Torre de Tribunales.
La decisión del juez Gálvez generó manifestaciones de beneplácito entre guatemaltecos, que eran críticos sobre los privilegios que se le habían otorgado a Baldetti.