POR SAIRA RAMOS
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Esta mañana integrantes de la Coordinadora Nacional Indígena y Campesina (Conic) del Frente Nacional de Lucha (FNL), de la Unidad de Acción Sindical y Popular (UASP), de la Alianza Campesina y del Sindicato de Trabajadores por la Educación (STEG), salieron a las calles del Centro Histórico a demandar que las elecciones del 6 de septiembre, se mantengan en firme pese al descontento ciudadano que exige la renuncia del Presidente.
La manifestación inició alrededor de las 8:00 horas, cuando más de 400 manifestantes se reunieron en las afueras de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), desde donde se desplazaron hacia las instalaciones de Prensa Libre, lugar donde hicieron pintas y gritaron consignas en contra de la labor que realiza ese medio de comunicación.
El dirigente de UASP, Nery Barrios, explicó que la movilización se hizo en apoyo a los comicios generales porque el “CACIF –Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras- la Embajada de Estados Unidos, Prensa Libre, Guatevisión, Emisoras Unidas y Publinews, están llamando a que no haya elecciones”, aunque esta información no es verídica.
“Nosotros estamos diciendo que sí -y creemos que- todo aquel funcionario que esté metido en actos de corrupción allí está el MP y la CICIG que los investigue y si son culpables allí están los tribunales. Se debe respetar el debido proceso -sin embargo-, lo que hacen los medios de comunicación es litigar antes para ver de que condenen y metan a la cárcel a cualquier persona, sea funcionario o civil”, refirió Barrios.
Los manifestantes luego de hacer pintas a las paredes de Prensa Libre, se condujeron sobre la 9ª. avenida de la zona 1, hacia las afueras del Tribunal Supremo Electoral (TSE), donde sostuvieron la misma demanda porque según el dirigente de UASP no se quiere un “golpe de Estado”, sino que se respete la “institucionalidad del país”.
PROTESTAS EN MENOS DE 24 HORAS
Las protestas de los movimientos afines al Ejecutivo se dieron después que, ayer, el presidente Otto Pérez Molina asegurara que no abandonará su cargo pese a las investigaciones que lo sindican de ser uno de los cabecillas de la red de defraudación aduanera conocida como La Línea; además de pedir a las organizaciones sociales a defender la “incipiente democracia” en aras de conseguir una “Guatemala más segura, más justa, más transparente, más participativa y próspera”.
