POR REDACCIÓN LA HORA

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Gustavo martines 2Gustavo Martínez, exsecretario general de la Presidencia, es señalado por el Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), por su presunta implicación en un caso de tráfico de influencias que involucra a la empresa Jaguar Energy. Además, se plantearon señalamientos contra César Augusto Medina Farfán, quien fungió como operador para beneficiar a la referida empresa y a Zeta Gas.

En conferencia de prensa, Iván Velásquez, jefe de la CICIG, expuso cómo César Augusto Medina Farfán habría fungido como operador en tres casos de corrupción, al que llamo «Caso Redes».

En el primero, Medina negoció en el 2014 con el entonces jefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Carlos Muñoz y la jefa de Departamento de la SAT, Lucrecia Roca, para beneficiar a la empresa Zeta Gas.

La empresa Zeta Gas quería un depósito aduanero privado en el Puerto Quetzal y para eso contactó a Medina Farfán, quien con su capacidad de incidencia en el sector público realizó gestiones irregulares en la SAT y así logró una sustitución del documento de póliza por responsabilidades por 5 millones de dólares a uno de póliza por Q5 millones de quetzales, explicó Velásquez.

CASO JAGUAR ENERGY

En el segundo evento, de acuerdo con Velásquez, Ernesto Córdova, representante de Jaguar Energy, buscó a Medina, “gran amigo” de Gustavo Martínez, para que este incluyera en la agenda del presidente reuniones con representantes de la empresa.

Velásquez indicó que Martínez utilizó sus influencias para que un diplomático de China no visitara un albergue donde se encontraban atrapados ciudadanos chinos, que trabajaban para una empresa con la Jaguar Energy que mantuvo una pugna legal.

Por todo esto el exsecretario general del presidente recibió una remuneración de US$120 mil que se hacía a través de Karen Cancinos, hija de uno de los amigos de Medina, quien simuló un contrato como asesora para Jaguar Energy, señala la acusación.

Medina es señalado de asociación ilícita, cohecho activo, tráfico de influencias y falsedad ideológica mientras que Martínez es señalado de asociación ilícita y tráfico de influencias. Martínez fue capturado poco después del mediodía en una residencia ubicada en la zona 10.

“Encontramos este grupo que está con el traficante de influencias de alto valor, el señor Medina Farfán, como el señor que representa diversos intereses, los cuales distribuye a través de las necesidades de sus clientes” explicó Velásquez.

Según el comisionado, la planta eléctrica de Jaguar Energy es el proyecto más grande en Centroamérica, con un valor aproximado de US$900 millones.

Los capturados  por el caso de Jaguar Energy son Martínez, exsecretario general del presidente; Cesar Augusto Medina, operador; Lucrecia Roca, funcionaria de la SAT, Karen Cancinos, quien simuló un contrato con Jaguar Energy y el exviceministro Edwin Rodas.

En este caso, el comisionado indicó que ni Pérez Molina ni el exministro de Energía y Minas, Erick Archila, están involucrados; los señalados aprovechaban su ausencia para realizar los negocios, anotó.

 

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