PAOLINA ALBANI
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Los jueces que serán denunciados este jueves son Claudia Elvira González, del Tribunal Pluripersonal de Femicidio; además del juez Carlos Humberto Pacay, Miriam Aidé Salvador Aldana y Ana María Rivera Méndez, quienes conforman el Tribunal Segundo de Femicidio.
De acuerdo con el abogado de Fundación Sobrevivientes, estos jueces habrían absuelto a diferentes personas de los delitos que esta judicatura persigue, aun cuando existían las pruebas judiciales suficientes para emitir condena en su contra.
Estas denuncias irían encaminadas a visibilizar ante los entes rectores de justicia –la CSJ y la Supervisión de Tribunales– que no se aplica el derecho de género en los juzgados especializados.
Igualmente, FS presentará un recurso de apelación especial en contra de las sentencias dictadas en diferentes casos, “esto lo que busca es cambiar el resultado del proceso”, indicó.
LOS CASOS
La juez Elvira González habría conocido un caso de violencia contra la mujer entre cónyuges, en el que el Ministerio Público (MP) y los querellantes contaban como medios de prueba con un dictamen médico y psicológico que daban prueba de la agresión cometida en contra de la conviviente del acusado.
Además está la aportación de un testigo –una empleada doméstica– y la declaración de la víctima, pero la juez descartó el testimonio de la testigo, ya que ésta mujer supuestamente habría sido contratada por la víctima, aunque Baten aseguró que la empleada fue contratada, desde el principio, por el agresor.
Como producto de la agresión, la mujer presentaba hematomas –o moretes– en una de sus manos; al no tratarse de ningún tipo de fractura, el Tribunal estimó que no contaba como hecho de violencia contra la mujer, aun cuando esto forma parte de hechos de violencia física.
Por otro lado, el Tribunal Segundo habría conocido el caso de una menor de 16 años, quien fue contratada para realizar oficios domésticos, incluyendo la limpieza y alimentación de más de 60 perros, los cuales eran criados por los contratistas de la menor.
Los animales le habrían ocasionado diferentes heridas en el cuerpo al tratar de atenderlos. Por aparte, la joven fue agredida físicamente por sus patrones y familiares, desde su contratación en mayo del 2009.
“Todos los días la agredían con cables de luz, palos, patadas, puños… con lo que se pudiera, no le daban ni un día de descanso, la obligaban a dormirse con los perros, solo comía una vez al día, le prendieron una vez fuego en el pelo… la dejaban sin pelo”, relató Baten. Finalmente, los acusados fueron absueltos. Los jueces no respondieron a La Hora.