Hombre pide perdón por ingresar en la oficina del presidente del OJ a robar un sacabocado y un monitor

Sergio Osegueda

«La verdad es que estoy realmente, no sé cómo decirlo, sí me siento mal por haber causado esos problemas», así inició su disculpa Rudy Salvador Pu Xalú ante un juez guatemalteco por haber ingresado en la oficina de presidencia del Organismo Judicial (OJ) en el 2024.

Prosiguió: «Llegar hasta acá no era realmente mi intención. Le pido una disculpa a ellos por el daño que les causé».

Lo anterior fue el testimonio de Pu Xalú tras aceptar haber ingresado en el 2024 en la oficina del entonces presidente de la Corte Suprema de Justicia, Óscar Cruz, y robar un sacabocado, un dispensador de cinta adhesiva y un monitor.

Según la defensa, al determinarse que no fue un delito mayor y haber devuelto las cosas, ya que nunca salieron de las instalaciones del Palacio de Justicia, solicitó una medida desjudicializadora.

Por no tener antecedentes, el Ministerio Público (MP) estuvo de acuerdo con la petición de la defensa y solicitó que se ordenara que Pu Xalú ingresara a programas para quitarse la adicción al alcohol y la drogas.

La misma opinión tuvo el representante del OJ que, a diferencia de las audiencias anteriores, esta vez sí se presentó a la misma.

SIN BEBER ALCOHOL

Tras analizar las peticiones de las partes, el juez A del Juzgado Sexto Penal, Carlos Toledo, accedió a darle el criterio de oportunidad solicitado, por lo que no le impuso ninguna pena de prisión, tras considerar que Pu Xalú no tiene tampoco antecedentes penales.

No obstante, ordenó que ingrese en el programa de Alcohólicos Anónimos por dos años y así mismo se abstenga de consumir alcohol y estupefacientes.

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ROBO SIN ESCLARECER

Aunque Pu Xalú, aceptó haber ingresado en las oficinas e intentar sustraer los artículos de oficina ya mencionados, la investigación no fue clara en indicar cómo la seguridad del OJ permitió que llegara hasta la oficina principal del presidente del Organismo.

De acuerdo con la fiscalía, Pu Xalú es un hombre en condición de calle que logró burlar la seguridad desde el sótano, ingresó por los elevadores, llegó al tercer nivel del Palacio de Justicia, sin ser visto.

Más aún, cruzó las puertas que normalmente tienen custodios y aun así nadie se percató de su ingreso hasta que ya se disponía a salir de las oficinas con los artículos en una bolsa.

Así mismo, la investigación no contaba con las declaraciones de los agentes captores, pues fueron removidos de sus cargos ante los errores que permitieron el ingreso del ladrón a las instalaciones.

De la misma manera, el OJ tampoco explicó dónde o cómo fue la falla en la seguridad.