Conred: “nos centramos en atender emergencias y no en reducir riesgos, y la factura para el país va a ser muy cara”

Sergio Morales

La subsecretaria de Gestión de Riesgo de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), Angela Leal, conversó con La Hora acerca de la vulnerabilidad del país ante los riesgos de origen natural y la necesidad de gestionarlos de mejor forma.

También habló de la reciente iniciativa de la ONU de incluir a Guatemala dentro del listado de países que recibirán apoyo financiero para la implementación de sistemas de alerta temprana.

Para Leal, el país ha experimentado una involución en los últimos años en materia de gestión de riesgos, lo que nos hace más vulnerables a sufrir los efectos del cambio climático.

La Hora: ¿Qué es lo que más nos debe preocupar, las amenazas o la capacidad que tiene el país de gestionarlas?

Angela Leal: Tenemos una combinación de ambos, las amenazas ahora son los fenómenos naturales que se acentúan más y nos golpean más duro. Pero también no hemos sabido gestionar los riesgos. Conocemos las amenazas, pero hemos dejado de un lado las vulnerabilidades y esa parte es la que más nos preocupa porque estamos rezagados.

L.H.: ¿Cómo ha evolucionado la capacidad que tenemos para gestionar los riegos?

A.L.: No ha evolucionado, al contrario, tuvimos una involución, nos centramos en atender la emergencia y no en reducir riegos y la factura para el país va a ser muy cara.

L.H.: Por ejemplo, ¿el hundimiento en la autopista Palín-Escuintla se pudo haber evitado?

A.L.: Ese es un ejemplo atípico porque lo que se dio en el kilómetro 44 de esa ruta se debe a los incendios provocados en el volcán de Agua, todo el remanente de material que quedó con las primeras lluvias eso fue lo que hizo que colapsara el túnel en ese punto.

Posiblemente si se hubiera podido ver por donde vendrían las correntadas y poner barreras, se hubiera podido hacer algo, pero no lo sabíamos, era muy difícil. Se pudo haber hecho algo, sí. De hecho, si desde hace años estuviéramos trabajando en prevención ahorita pudimos haber tenido una mejor respuesta.

L.H.: ¿Hacen falta recursos o personal, cómo está la Conred actualmente?

A.L.: Sí, hacen falta. Tenemos la ventaja de que tenemos un gran respaldo de los tomadores de decisiones lo que necesitamos es afinar más el sistema y que cada uno de los ministerios sepa qué le corresponde hacer y cómo articularse mejor.

L.H.: ¿Cómo se encuentran los sistemas de alerta temprana para evitar que personas fallezcan?

A.L.: Tenemos la ventaja de que Guatemala fue seleccionado por la Oficina de Riesgos de Desastres de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), para establecer el sistema de alerta temprana para todos y tenemos el respaldo político, técnico y financiero para poder levantar el sistema de alerta temprana ante las diversas amenazas. Vamos a establecer nuevamente estos sistemas tan oportunos y necesarios.

L.H.: ¿O sea que estaban descuidados?

A.L.: Unos descuidados y otros muy reducidos. Otros están muy bien, como los que funcionan en el volcán Santiaguito y el de Fuego.

L.H.: ¿Se van a invertir recursos en este aspecto?

A.L.: En el Marco de Acción de Sendai para la Reducción de Desastres 2015-2030 se dice que debemos trabajar en estos sistemas para salvar vidas, pero el Covid-19 hizo que nos rezagáramos mucho. Pero a nivel internacional se propuso ayudar a los países y Guatemala salió favorecido para implementar un sistema multiamenazas, de origen natural. Ahora mismo, el país ya cuenta con el análisis y diagnóstico previo y estamos en la etapa de comenzar con la implementación.

L.H.: ¿Qué incluye este apoyo?

A.L.: Tener un Insivumeh —Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología— mucho más fortalecido que logre hacer todo el análisis y levantamiento de información que se necesita para tener todos los sistemas operando de la mejor manera. Sin un ente científico que nos dé la información necesaria es mucho más difícil decir dónde debemos trabajar y actuar. De ahí, faltan otros estudios sísmicos e hidrológicos y trabajar en la capacitación y conformación de coordinadoras desde el nivel local, no solo para atender emergencias, sino para coordinar que trabajen en función de reducir riesgos.

L.H.: Hoy en día, ¿funcionan los sistemas de alerta? 

A.L.: En el sur hay buenos sistemas de alerta para inundaciones, —pero— en áreas de deslizamiento o derrumbes no hay y es muy difícil porque tendríamos que tener conectada la red vial y las montañas del país y no se pueden poner sensores en todas las montañas. Sí hay monitoreo y se notifica a las personas que no deben estar en ciertas rutas. Pero no se trata de desocupar el país, sino de que aprendamos a vivir y a tener las obras de mitigación que se requieren para no correr riesgos.

L.H.: Hablando de las lluvias ¿cómo esperan la segunda parte de invierno?

A.L.: Hay preocupación porque justo ahorita estamos en canícula y pasamos de la época neutra a la del fenómeno La Niña y esto nos genera mucha agua. Mitch —el huracán—fue en un año influenciado por el fenómeno La Niña, Stan, Eta e Iota, también y va a haber muchísima agua por las condiciones de susceptibilidad que tenemos en el país.

L.H.: ¿Qué departamentos les preocupan más? 

A.L.: Todos. Cuando empiezan a venir las ondas del este lo hacen por distintos departamentos y a distintos niveles, cuando ya se instalan fenómenos que se originan por La Niña tenemos en el Pacífico más cantidad de agua. Luego, cuando sube a las montañas también, los ríos se llenan e inundan la Costa Sur.

Esto es en el Pacífico, con el área del Golfo de México y el Atlántico generalmente entran fenómenos al final de la temporada, entonces tenemos que poner especial atención en Petén y en la Franja Transversal del Norte.

L.H.: ¿Estos huracanes y tormentas que menciona se produjeron en un año con similares características al 2024? 

A.L.: Son referencias, cada cierto número de años el invierno se manifiesta con ciertas características. Con La Niña esperamos lluvias más intensas de lo normal.