El Congreso se apresta para conocer el decreto de Estado de Calamidad Pública emitido por el Organismo Ejecutivo el pasado lunes 8 de julio, con el cual pretende hacerle frente a una serie de eventos causados por las lluvias y que han golpeado fuertemente a la infraestructura y con ello a la economía nacional.
Hasta la mañana del miércoles 10 de julio, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) contabilizaba daños en 490 carreteras, 13 edificios públicos y 39 puentes; de estos, cinco fueron destruidos.
Varios diputados se han adelantado al debate y han afirmado que no votarán para ratificar el Estado de Calamidad. Argumentan que la amenaza del huracán Beryl ya se retiró y que no hay razón para implementar una medida de ese tipo.
A juicio de legisladores como Nadia de León (Nosotros) y Esduín Javier (Cambio), actualmente en Guatemala no hay ninguna calamidad.
LOS DE GIAMMATTEI
La legislatura pasada no puso mayores reparos para ratificar los estados de Calamidad que decretó el expresidente Giammattei. En total, al exgobernante el Congreso le ratificó nueve de los 11 decretos que emitió, seis por la pandemia y tres por emergencias climáticas.
Al gobierno de Bernardo Arévalo, esta legislatura ya le rechazó el primero, que pretendía combatir los incendios forestales, y todo apunta, según analistas, de que el que conocerán este 11 de julio tampoco será ratificado.
En cuanto a la administración de Giammattei, en 2020 decretó el Estado de Calamidad por la pandemia del coronavirus el 5 de marzo, luego lo modificó y pidió cuatro prórrogas. Estos le permitieron ejecutar Q14 mil 591 millones en los cuatro años, según el Sistema de Contabilidad Integrada del Estado (Sicoin).
En 2020 se gastaron Q10 mil 367 millones; en 2021, Q2 mil 152; para 2022, el gasto fue de Q1 mil 404 millones. En 2023 todavía se ejecutaron recursos dentro de este decreto gubernativo por Q666.3 millones.
Las instituciones que más ejecutaron recursos amparados en dicho Estado de Calamidad y sus ampliaciones fueron: El Ministerio de Desarrollo Social (Mides), que ejecutó Q6 mil 496 millones; Salud, con un gasto de Q5 mil 227 millones y el Ministerio de Economía, que ejecutó Q2 mil 400 millones.
En tendencia:
El enojo de Curruchiche
Golpe al MP: Sala confirma que fiscal anticorrupción, Eduardo Pantaleón, no cometió ningún delito en caso cuestionado
Aprueban reforma que prohíbe a PMT imponer multas en rutas nacionales
Alcalde de Villa Nueva advierte de peligros por Ley de Tránsito que propone Cristian Álvarez
Ataque armado provoca caos vehicular en la avenida Petapa y sectores aledaños
TORMENTAS TROPICALES
Por aparte, el Congreso también ratificó estados de Calamidad por las tormentas tropicales ETA e IOTA, en 2020; así como Blas, Celia y Julia, en 2022. Los recursos ejecutados gracias a estos decretos de excepción se concentraron en el Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV) y otra parte en los ministerios de la Defensa, Agricultura y Desarrollo Social.
El Estado de Calamidad decretado por las tormentas ETA e IOTA permitieron al gobierno de Giammattei ejecutar Q1 mil 285.6 millones, de acuerdo con el Sicoin, el decretado para atender las consecuencias de las tormentas Blas y Celia, Q1 mil 90 millones; y finalmente el aprobado por la tormenta Julia, Q1 mil 317 millones.
COMPRAS
Por su parte, a primera hora de este miércoles 10 de julio, el CIV ya comenzó a subir concursos bajo el amparo del estado de Calamidad.
En el portal Guatecompras la Dirección General de Caminos (DGC) publicó dos concursos bajo la modalidad «procedimientos regulados por el artículo 44 (casos de excepción», de la Ley de Contrataciones del Estado. El primero para atender daños en la autopista Palín-Escuintla, del kilómetro 39.2 al 45.6.
El segundo concurso también es de la DGC y es para la compra de cinco puentes «tipo modular» de uno y dos carriles, de distintas longitudes.
Según la publicación, este miércoles 10 se vence el plazo para presentar ofertas, la adjudicación podría ser igual de rápida.