El Superintendente Marco Livio Díaz y el Intendente de Recaudación Fernando Suriano, atienden citación de la Comisión de Finanzas del Congreso de la República. Foto: SAT

La Comisión de Finanzas y Moneda del Congreso de la República llegó a la fase final de las audiencias públicas a ministerios, secretarías, organizaciones no gubernamentales, fundaciones, entre otras, para conocer sus argumentos y peticiones de fondos públicos, previo a la elaboración del dictamen al proyecto de Presupuesto General de Ingresos y Egresos de la Nación 2022.

Este jueves, los diputados de esa sala legislativa se reunirán con el titular de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Marco Livio Díaz, para conocer “la nueva meta de recaudación”, así como incluir los montos de la Ley de Alimentación Escolar y la Ley de Emergencia, rubros que tendría que mantenerse para el próximo ejercicio fiscal, explicó el diputado Duay Martínez, presidente de la Comisión.

Los legisladores tienen previsto para la semana del 2 al 5 de noviembre analizar a profundidad y discutir los rubros que componen el Presupuesto General de la Nación para el 2022 y comenzar a elaborar el dictamen el cual podría estar listo en la primera quincena de noviembre, para que posteriormente se conozca en el pleno del Congreso.

 

EL PRESUPUESTO

El pasado 2 de septiembre el ministro de Finanzas Públicas, Álvaro Gonzales Ricci, entregó al Congreso la propuesta de Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado para el 2022 por Q103.9 millardos. La solicitud aplicaría un aumento de Q10,030,600,000 al presupuesto vigente que es de Q93,869,400,000.

Según la cartera, el techo presupuestario será financiado con ingresos tributarios más un aproximado de Q16,900,000 de deuda y préstamos.

EL PLAZO

La Constitución Política de la República en su artículo 171, inciso b, establece: “Aprobar, modificar o improbar, a más tardar treinta días antes de entrar en vigor, el Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado. El Ejecutivo deberá enviar el proyecto de presupuesto al Congreso con ciento veinte días de anticipación a la fecha en que principiará el ejercicio fiscal. Si al momento de iniciarse el año fiscal el presupuesto no hubiere sido aprobado por el Congreso, regirá de nuevo el presupuesto en vigencia en el ejercicio anterior, el cual podrá ser modificado o ajustado por el Congreso”.

 

Artículo anteriorEE. UU.: Economía tiene peor crecimiento desde la recuperación
Artículo siguienteOMS: Europa registra mayor cantidad de casos nuevos de COVID-19