En la noche del pasado sábado, la nueva Asamblea de El Salvador destituyó a los magistrados de la CSJ., varios países se han pronunciado. Foto: Asamblea Legislativa.

Por María España
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Ayer, a pocas horas de haber sido juramentada la Asamblea Legislativa de El Salvador, esta decidió con 64 votos a favor, destituir a cinco magistrados de la Sala de lo Constitucional, así también al fiscal general, Raúl Melara. Ante ello, organizaciones sociales y miembros de la comunidad internacional se han pronunciado al respecto, expresando su rechazo a la forma en que procedió la Asamblea salvadoreña.

“Denunciamos que el revestimiento jurídico de las destituciones es una burda simulación que no resiste el más mínimo análisis de coherencia, rompe el orden constitucional y atenta contra el derecho de todos los salvadoreños a una justicia independiente y por ellos también llamamos a la Sala de lo Constitucional a declarar la inconstitucionalidad de la destitución del Fiscal General de la República para restablecer el orden”, destacan más de 20 organizaciones por medio de un comunicado.

En este sentido, hacen un llamado a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a la Organización de los Estados Americanos (OEA) y a toda la comunidad internacional a expresar su rechazo por la “toma arbitraria” de las instituciones por parte del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, y de diputados. Así también que desconozcan a las personas que “usurpan los cargos de funcionarios legítimamente elegidos”, y activar medios jurídicos y diplomáticos de “condena y sanción”.

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Sobre las organizaciones firmantes se menciona el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), Acción Ciudadana, Fundación para el Debido Proceso, Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social, y la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador, entre otros.

RIESGO AL ESTADO DE DERECHO

El Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL, por sus siglas en inglés), expresó a través de su cuenta de Twitter los siguiente: “CEJIL condena la destitución, sin legítima causa, de los magistrados de la Sala de lo Constitucional en #ElSalvador. Es una afrenta a la independencia judicial y a la República. Esperamos la pronta restitución del orden constitucional y el respeto a la independencia de poderes”.

Por su parte, la OEA indicó que rechaza la situación de El Salvador, destacando que en la democracia las mayorías tienen la responsabilidad de asegurar el respeto a los Derechos Humanos y libertades fundamentales, así también el acceso al poder sujeto al Estado de Derecho. Añade que la cooptación del Poder Judicial conduce a una sociedad “injusta basada en la impunidad y en la persecución política”.

“Cuando las mayorías imponen una visión única y uniformizada para el resto del sistema político, están socavando estos principios. Cuando las mayorías eliminan los sistemas de pesos y contrapesos en el marco institucional están alterando la esencia del funcionamiento del mismo”, expresa por medio de un comunicado.

A decir de Diego García-Sayán, Relator Especial para la Independencia de Jueces y Abogados, aseguró que la destitución de los magistrados es un paso del poder político para “desmantelar y debilitar la independencia judicial”. Añadió que las destituciones deben atender causas específicas y establecidas en la ley.

En tal sentido, aseguró que la Relatoría “permanecerá vigilante y actuará contra toda acción orientada a afectar la labor de los jueces constitucionales en El Salvador”.

ESTADOS UNIDOS TAMBIÉN SE PRONUNCIÓ

La Subsecretaria interina de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos, Julie Chung, expresó: “La existencia de una relación fuerte entre Estados Unidos y El Salvador dependerá de que el gobierno de El Salvador apoye la separación de poderes y de que sostenga las normas democráticas”.

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Además de otros congresistas que también se pronunciaron, Albio Sires señaló: “La destitución de los miembros de la sala de lo constitucional por parte de Bukele y sus aliados es un abuso del poder, un acto ilegal de venganza, y un gran paso hacia el autoritarismo. Sí no se reconsidera, el gobierno de EE. UU. debe disminuir la cooperación con su gobierno”.

“NO ES DE SU INCUMBENCIA”

En respuesta a las diversas reacciones internacionales, el presidente Bukele indicó: “A nuestros amigos de la Comunidad Internacional: Queremos trabajar con ustedes, comerciar, viajar, conocernos y ayudar en lo que podamos. Nuestras puertas están más abiertas que nunca. Pero con todo respeto: Estamos limpiando nuestra casa y eso no es de su incumbencia”.

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