Por Lourdes Arana
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Este 2021 se conmemoran 41 años de la quema de la Embajada de España en Guatemala, un hecho que consternó a propios y extranjeros el 31 de enero de 1980. En esa ocasión fallecieron 37 personas y hoy organizaciones sociales honraron sus memorias.
Feliciana Macario, integrante de la Coordinadora Nacional de Viudas de Guatemala (Conavigua), comentó esta mañana durante las actividades que se realizaron en la 10 calle 6-20 de la zona 9, que la intención era honrar a las víctimas y recordar que buscaban una vida digna.
“Estamos acá conmemorando los 41 años de nuestros hermanos quichelenses y personas de otros territorios que fueron lamentablemente quemadas en este lugar. Esto para nosotros significa mucho, conmemorar su vida y conmemorar esa enseñanza de lucha que nos dejaron por la defensa de la vida y los Derechos Humanos, así como la niñez y la juventud, porque lo que se buscaba era una vida digna para los seres humanos de la sociedad civil de Guatemala”, indicó Macario.
“Y esto para nosotros es como tomar fuerzas, de lo que nos enseñaron, la vida de ellos es como un granito de maíz que hoy está retoñando para las futuras generaciones”, añadió.
Feliciana Macario miembro de la junta de Conavigua, comentó esta mañana sobre la reconmemoracion de los 41 años de la quema de la embajada de España.
?: José Orozco/LH pic.twitter.com/jpa7cT99Jq
— Diario La Hora (@lahoragt) January 31, 2021
LOS HECHOS
El 31 de enero de 1980, un grupo de personas, campesinos y estudiantes de la Universidad de San Carlos de Guatemala, (USAC), ingresaron de forma pacífica a la embajada de España para hablar con el embajador Máximo Cajal y solicitar apoyo debido a los hechos de violencia que padecían en ese momento por parte del Ejército.
Luego del ingreso de los campesinos y estudiantes, la Embajada fue rodeada por la Policía Nacional. El embajador intentó negociar las solicitudes de estos, sin embargo, no fueron escuchados, Cajal también solicitó la presencia de la Cruz Roja, para sacar a las mujeres que se encontraban dentro del edificio.
A eso de la una de la tarde de ese jueves, las fuerzas policiales comenzaron a ingresar a la Embajada y a pesar de los intentos del embajador Máximo Cajal de negociar para permitir el desalojo de la sede diplomática de forma pacífica, este fue obviado y se produjo el incendio.
EL REPORTE DE LA CEH
La Comisión para el Esclarecimiento Histórico (CEH) documentó que no se realizó un peritaje sobre el origen del incendio, las investigaciones de las autoridades españolas informaron que sobre las víctimas se utilizó “gas inerte” o algún gas similar, porque los fallecidos se encontraban petrificados en posturas incompatibles con un incendio producido por gasolina.
El reporte de la CEH indicó en su reporte que las fuerzas policiales habrían utilizado un lanzallamas o un lanzador de gas inerte contra todas las personas que se encontraban refugiadas de los ataques dentro del despacho del embajador Máximo Cajal.
