Las reflexiones de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, describen desde distintas aristas a una Guatemala con una creciente persecución contra actores de justicia y defensores de derechos humanos durante el 2021, acompañado de violaciones sistemáticas a sectores vulnerables. A pocos meses de iniciado el 2022 se puede observar que este contexto no ha cambiado sustancialmente.
El informe de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos se despliega en cuatro puntos principales: desafíos en materia de derechos humanos; ataques y persecución judicial; reducción del espacio cívico; violencia contra las mujeres y disidencias sexuales.
ATAQUES A LA INDEPENDENCIA JUDICIAL
En 2021 la oficina de Bachelet tuvo conocimiento de distintos ataques y la continua persecución judicial en contra de operadores de justicia por su labor, incluso a través del uso frecuente de antejuicios.
En particular, la comisionada refirió que los ataques van dirigidos hacia fiscales, abogadas y abogados a cargo de casos de corrupción e impunidad y casos emblemáticos de graves violaciones de derechos humanos durante el Conflicto Armado Interno.
“Estos ataques representan un patrón preocupante que socava el Estado de derecho y la independencia judicial”, alertó.
DESIGUALDADES EXACERBADAS
En su informe, Bachelet fue concisa al declarar que “Guatemala sigue enfrentando serios desafíos en materia de derechos humanos”. De acuerdo con la representante, las desigualdades en la población fueron exacerbadas durante la pandemia del COVID-19.
En consecuencia, puntualizó un incremento en los niveles de pobreza en el país, en particular para los pueblos indígenas, personas afrodescendientes y las personas con empleos informales; “una situación que requiere la atención urgente de las autoridades”, aseguró.
REDUCCIÓN DEL ESPACIO CÍVICO
La alta funcionaria de la ONU atribuyó una reducción en la participación cívica a los constantes ataques contra quienes defienden los derechos humanos y documentan sus violaciones.
En el informe se mencionó la documentación de 103 ataques contra personas defensoras de derechos humanos y seis asesinatos en 2021; así como 33 ataques contra periodistas.
“Es fundamental que las autoridades tomen medidas para reforzar la legislación y las políticas de protección de las personas defensoras de derechos humanos y periodistas”, resaltó Michelle Bachelet.
VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES Y POBLACIÓN LGBTIQ+
Desde otra perspectiva, la comisionada mostró su preocupación por el aumento de violencia contra las mujeres guatemaltecas y la población LGBTIQ+.
Este incremento fue determinado con base en los 60,089 casos de violencia contra mujeres y 478 femicidios registrados en el Ministerio Público (MP) durante 2021. A la vez, menciona que la Oficina de Bachelet tuvo conocimiento de al menos 29 personas LGBTIQ+ asesinadas en ese periodo.
“Estos altos niveles de violencia requieren que las autoridades tomen medidas inmediatas de prevención y protección”, urgió.
El 8 de marzo tiene un significado diferente para muchas de nosotras y aquí el punto de vista de 8 mujeres. ♀️?
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— Diario La Hora (@lahoragt) March 8, 2022
UN ÚNICO RESPIRO
El único aspecto positivo que la Alta Comisionada de Naciones Unidas mencionó fueron los avances realizados en los casos de violaciones de derechos humanos cometidas durante el Conflicto Armado Interno, un punto resaltado aún más tomando en cuenta la persecución contra los jueces y fiscales a cargo de estas carpetas.
Además de alentar a las autoridades a seguir avanzando en los casos pendientes, Bachelet invitó al Gobierno a continuar cooperando con todos los mecanismos de derechos humanos de la ONU y regionales para avanzar en la promoción y protección de los derechos humanos en el país.