La subsecretaria de Estado de Seguridad Civil, Democracia y Derechos Humanos de Estados Unidos, Uzra Zeya, expuso que los participantes de la Cumbre por la Democracia son, específicamente, gobiernos dispuestos a colaborar en pro del Estado de Derecho y la democracia, contrario a Guatemala, El Salvador y Honduras, quienes aún quedan cortos a las expectativas de EE. UU.
La nueva explicación expuesta por Zeya, en conferencia de prensa a pocas horas de iniciar la cumbre convocada por el presidente estadounidense Joe Biden, prevista para el 9 y 10 de diciembre con la participación de 110 países, para acercar a gobernantes, miembros de la sociedad civil, filántropos y sectores privados en un diálogo sobre la consolidación de la democracia en los países, a la que Guatemala no fue invitada.
EL ESFUERZO ES RECONOCIDO, PERO AÚN INSUFICIENTE
Zeya expuso que “no es ningún secreto” que las democracias de todo el mundo se enfrentan a desafíos crecientes, asegurando que “los países de prácticamente todas las regiones del mundo han experimentado cierto grado de retroceso democrático”.
Sin embargo, diferenció que Guatemala, El Salvador y Honduras todavía carecen del avance necesario para ser considerados como países dispuestos a luchar por el Estado de Derecho y la buena gobernanza.
“Acogemos con beneplácito el progreso en algunas de estas áreas clave que podrían hacer eso posible, pero nuestra atención esta semana está realmente trabajando con los gobiernos que han demostrado su disposición a avanzar y a asumir compromisos en estas áreas”
La subsecretaria de Estado de Seguridad Civil, Democracia y Derechos Humanos de Estados Unidos, Uzra Zeya
Ante la consulta si lo anterior implicaba que los países del Triángulo Norte aún no han presentado avances considerables en los últimos meses, respondió:
“Bueno, quiero decir que, con respecto a algunos de estos países, hay una serie de preocupaciones con respecto a la dirección del Estado de Derecho y la gobernanza y los esfuerzos anticorrupción. Así que ciertamente alentamos más”.
LA NO INVITACIÓN NO SIGNIFICA TOTAL DESAPROBACIÓN
La subsecretaria de Estado remarcó que Estados Unidos ha contraído compromisos sustanciales respecto a la gobernanza, el apoyo al progreso democrático, la lucha contra la corrupción y la promoción del Estado de Derecho en Guatemala, El Salvador y Honduras, por lo cual negó el rechazo de la administración Biden-Harris hacia estos gobiernos.
“Tenemos relaciones vibrantes con todos estos países que usted mencionó. Pero al final, la invitación a unirse a nosotros en la cumbre, no es una señal de aprobación, ni la no invitación de la cumbre es una señal de desaprobación de los Estados Unidos”, matizó.
Asimismo, destacó que la administración de Joe Biden y Kamala Harris está dispuesta a trabajar con cualquier gobierno que quiera comprometerse o unirse a los esfuerzos que pondrán en la mesa próximamente.
“Estamos dispuestos a involucrar a todos los gobiernos que estén dispuestos a trabajar con nosotros en esta agenda -Cumbre de la Democracia-, va a ser una reunión muy abierta y transparente que la mayoría de ustedes podrán observar y comentar; haremos un seguimiento más adelante en el año y durante el año que viene para tratar de que estos compromisos formen parte de un esfuerzo colectivo y significativo”, sostuvo.