La tarde del martes 23 de julio las autoridades reportaron la captura del décimo extraditable del año. Se trata de Guillermo Vinicio Herrera García, hermano de Otto Herrera García, considerado como el mayor narcotraficante que ha tenido Guatemala y ha sido punto de partida para otras estructuras criminales.
Guillermo Herrera, de 58 años, fue detenido en un operativo que se desarrolló en la zona 15 de la Ciudad de Guatemala. El hermano de Otto Herrera usa los alias “Willie”, “Champion” o “el Padrino” y lo requieren para comparecer a juicio en la Corte Distrital de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Florida, por conspiración para distribuir cocaína.
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Según una investigación del Ministerio Público, Guillermo Herrera, operó como receptor de cargamentos de cocaína que eran enviados desde Colombia a Centroamérica y México y finalmente eran importados a Estados Unidos, siguiendo así el legado de su hermano mayor.
Otto Herrera fue fundador de una organización que traficaba drogas desde Colombia hasta EE. UU., y le servía de transportista al Cartel de Cali, Colombia y al de Sinaloa, México, según las investigaciones oficiales.
🚨OTRO EXTRADITABLE🚨
¡CAPTURADO! Guillermo Herrera, alias “El Padrino” fue capturado en la zona 15 de la ciudad capital por @PNCdeGuatemala 💪🏼
Un gran éxito interinstitucional liderado por #SGAIA. #MinisterioDeGobernación
¡No hay mañana, #LaSeguridadEsHoy! pic.twitter.com/yY8lJ0OnCB— Francisco Jiménez (@FJimenezmingob) July 23, 2024
OTTO HERRERA, FUGA Y CAPTURA
Según información del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Otto Roberto Herrera García, nacido en Guatemala el 14 de marzo de 1968, era el líder de una organización narcotraficante responsable de transportar grandes cantidades de cocaína desde Colombia, a través de Centroamérica y México, a los Estados Unidos desde 1998.
«La organización traficante de Herrera-García es muy violenta: se sabe que asesinó a presuntos informantes, incluido uno que sufrió 18 heridas de bala», revela el expediente del Departamento de Estado.
En 2004 Estados Unidos ofreció una recompensa de hasta 2 millones de dólares por información que condujera al arresto y/o condena de Otto Herrera, alias «Pipa», «el Ingeniero», “el Compadre”, “Villagrán” y “Francisco”.
El Proyecto de Denuncia de la Corrupción y el Crimen Organizado (OCCRP, en inglés) despliega una ficha del narcotraficante, quien estuvo ligado a los cárteles de Cali y Sinaloa.
El 21 de abril de 2004, Otto Herrera fue arrestado en la Ciudad de México, pero el 13 de mayo de 2005 se fugó del Reclusorio Sur de México.
De acuerdo con una publicación del periódico mexicano La Jornada del 18 de mayo de 2005, Herrera habría logrado escapar gracias a una amistad que entabló con el director de la prisión, Armando Azurara, en la que hubo acuerdos monetarios.
El 21 de junio de 2007, fue arrestado en Colombia y fue recluido en la cárcel de Cómbita, en el departamento de Bocayá, Colombia, según detalla el diario El Tiempo. Sin embargo, la orden de extradición solicitada por dos cortes federales estadounidenses de Columbia y Florida fue ejecutada y fue entregado a EE. UU.
Un reporte de InSigth Crime asegura que Herrera fue liberado el 8 de diciembre del 2013. Desde entonces no se ha sabido nada de él.
El 22 de abril del 2020, la Oficina de Control de Activos Extranjeros de EE. UU. (OFAC, en inglés) eliminó a Herrera de la lista de sancionados económicos.
Había estado preso en Estados Unidos desde 2007. Según reportes de la época, Herrera colaboró con la justicia estadounidense para dar detalles sobre operaciones de narcotráfico y delató a otros criminales.
Para Herrera trabajaron otros narcotraficantes como Jorge Mario “el gordo” Paredes, Otoniel “el loco” Turcios, Byron Berganza, la familia Lorenzana, Horst Walther Overdick y Mario Ponce, entre otros. La mayoría extraditados y condenados en Estados Unidos.
