Por Grecia Ortíz
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Luego que se conociera por un reporte del Wall Street Journal, que Guatemala estaría cerca de cerrar una propuesta con Estados Unidos para recibir a solicitantes de asilo mexicanos y brasileños en el país como parte del acuerdo de Tercer País Seguro, el procurador de los Derechos Humanos y una analista criticaron al Gobierno por aceptar este tipo de propuestas, dado que el país no tiene la capacidad para brindar protecciones.
La propuesta, según explicó el ministro de Gobernación, Enrique Degenhart, surge luego que Estados Unidos haya recibido de manera “atípica”, más solicitudes de asilo de ciudadanos de México.
Degenhart también le atribuyó la propuesta al “éxito y logros” de implementación del acuerdo firmado entre ambos países por el que 44 personas de origen hondureño y salvadoreño han llegado desde noviembre al país.
En dos meses del año fiscal 2020, los ciudadanos mexicanos, superan las estadísticas de migrantes centroamericanos detenidos en la Frontera Sur. El WSJ, también apuntó a que los términos del acuerdo “no limitaban las nacionalidades de los migrantes”.
Ayer el presidente electo Alejandro Giammattei, expresó en referencia al acuerdo y de la posibilidad de enviar a personas de otras nacionalidades: “lo desconozco, recuérdense que ha sido como alguien lo describió, un secreto bien guardado, nos enteraremos el 14 de enero al parecer, porque este gobierno no tiene ningún buen ánimo de querer compartir información”.
PDH: SE SIGUE SIN SABER CONTENIDO DE ANEXOS Y SIN PUBLICAR ACUERDO
Aceptar una propuesta como tal, a decir del magistrado de conciencia, Jordán Rodas, resulta contradictorio, puesto que el Estado no tiene la capacidad para brindar protecciones, además, que no hay jurisprudencia desarrollada para brindar asilo y refugio.
“Pone en riesgo de trata a las personas, todo es negativo… es una gran paradoja porque es una total irresponsabilidad del Gobierno de Jimmy Morales, estar queriendo -aceptar- ante cualquier capricho del presidente Trump, sin la mínima dignidad como quedo evidenciado, entonces no solo no hay dignidad, tampoco capacidad de propuestas ni de negociación”, mencionó.
Además, explicó que “todo sigue siendo oscuro y bajo la mesa”, porque los anexos siguen sin ser conocidos y el acuerdo tampoco se ha publicado, aspectos que omiten lo que ya había dicho la Corte de Constitucionalidad de que el acuerdo debía llegar al Congreso para ser conocido y aprobado.
Rodas, destacó que una de las razones por las que las personas no se quedan en el país es debido a que no lo ven como seguro y finalmente aseveró que se está comprometiendo al gobierno del presidente electo Alejandro Giammattei.
NO HAY CAPACIDAD
Mientras la directora del Úrsula Roldán del Instituto de Investigación y Proyección sobre Dinámicas Globales y Territoriales (IDGT) de la Universidad Rafael Landívar, mencionó que más bien parece que el gobierno de Trump utiliza a los gobernantes de Centroamérica por el nivel de impunidad que tiene.
“Nosotros no tenemos ninguna capacidad sea para centroamericanos, sea para mexicanos, brasileños, no hay albergues ni sistema de asilo implementado, no hay jueces no hay procesos, para mí este es un juego y show político del Presidente de Estados Unidos”, afirmó.
Roldán, también cree que se necesitan muchos recursos para recibir a personas de diferentes nacionalidades, además, que se pondría en vulnerabilidad a las personas que solicitan asilo “al no encontrar soluciones en Guatemala van a seguir pasando de país en país”.
