Luego de ocho meses de trabajos de remodelación en el estadio nacional Doroteo Guamuch Flores, este quedó finalmente abandonado y con una lona que cubre lo que era la gramilla del campo de fútbol, luego de la rescisión del contrato de mutuo acuerdo entre la Constructora Bremar y la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala (CDAG).
La rescisión del contrato se da luego que la CDAG resolvió no autorizar la prórroga de 11 meses solicitada por la constructora el pasado 27 de octubre.
CDAG pagó a Bremar más de Q9 millones por un 34% de avance en estadio Doroteo Guamuch Flores
La entidad deportiva decidió rescindir el contrato por recomendación de la Contraloría General de Cuentas (CGC) el 21 de noviembre, lo que hizo que entrara en vigor un plazo de diez días, el cual finaliza el próximo 5 de diciembre para que se pueda iniciar a cobrar la fianza.
El proyecto fue objeto de fiscalización por parte de los legisladores de la Comisión de Deportes del Congreso, y criticado por cientos de aficionados de la Selección de Guatemala, puesto que la Bicolor no pudo contar con estas instalaciones para sus juegos de la eliminatoria mundialista.
La Constructora Bremar se comprometió a adquirir e instalar gramilla híbrida y pista de atletismo nueva, negociando con un distribuidor para Centroamérica de las marcas Hatko y Mondo, respectivamente. Sin embargo, por problemas en los acuerdos con el distribuidor, Superficies Deportivas de Guatemala (SDG), las compras de materiales nunca se hicieron.
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