Para viajar a África y el sur del continente Americano debes vacunarte contra la fiebre amarilla

«La fiebre amarilla es una enfermedad de carácter tropical, por ende, se registran casos en países del continente africano y América del Sur», dijo el jefe de epidemiología del Ministerio de Salud, Edgar Santos.

Santos comentó que en Guatemala se registró un caso en el año de 1940, desde entonces no se ha vuelto a registrar esta enfermedad.

 

¿LA VACUNA ES UN REQUISITO?

Según el jefe de la Dirección de epidemiología y Gestión de Riesgo, Edgar Santos, señaló que para viajar a los países africanos y la región Sur del continente Americano, es un requisito vacunarse 15 días antes de la fecha de la salida del territorio guatemalteco.

El Ministerio de Salud, ha determinado dos Centros de Salud para aplicar la inyección para evitar contraer la fiebre amarilla, siendo el Centro de Salud de zona 1. Los horarios de atención son días lunes y jueves, de 7 a 14 horas y en el Centro de Salud de zona 11, los días miércoles y viernes de 7 a 14 horas.

Los requisitos para que sea aplicada la vacuna, comprender la edad de 9 meses a 60 años, presentar el Documento Personal de Identificación (DPI), pasaporte y boleto aéreo, para saber que su destino es a un país endémico a la fiebre amarilla, la misma es gratuita, señaló el jefe de epidemiología de Ministerio de Salud.

¿QUÉ ES LA FIEBRE AMARILLA?

La fiebre es una enfermedad viral producida por un virus por la picadura de un mosquito, la cual tiene síntomas similares al dengue, señaló Edgar Santos, jefe de la Dirección de Epidemiología y gestión de riesgo del Ministerio de Salud Pública.

Santo mencionó que los síntomas de la fiebre amarilla son dolor muscular, fiebre, dolor de cabeza, náuseas, perdida de apetito, vómitos y en casos especiales puede dar diarrea, efectos que pueden ser notorios entre tres a seis días, después de haber sido picados por la hembra de un mosquito infectado.

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Los días más complicados de la fiebre son el cuarto y quinto día, según el funcionario quien agregó «que una de las secuelas que podría dejar son daños en el hígado, por ello las personas pueden ponerse amarillas, como que fuera hepatitis».

Además, Santos dijo que de no recibir el tratamiento médico adecuado, este podría perder la vida 15 días después de haber contraído la enfermedad.