Los feligreses asisten este miércoles 22 de febrero a los diferentes templos católicos para la imposición de ceniza, actividad que abre paso a la Cuaresma. Para los creyentes, significa un tiempo de preparación interna para la Semana Santa; una tradición en la que se conmemora la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor, considerado el acto más grande que cambió el rumbo de la humanidad.
La tradición oficial es la imposición de ceniza de un sacerdote sobre la frente de los asistentes, dibujando el símbolo de la cruz. El motivo no es más que recordar, la vida pasajera del hombre en la Tierra y el carácter mortal del cristiano. En esa medida, se llama a la reflexión, previo al acto de amor que conmemora lo que el Redentor hizo por la humanidad, morir por ella para la salvación de pecados.
En la imposición, el presbítero pronuncia la frase: «Polvo eres y en polvo te convertirás», como se menciona en el libro de Génesis capítulo 3 versículo 19 de las escrituras bíblicas, con lo que termina de cobrar sentido esa actividad. Por último, viene acompañado de un ejercicio de ayuno y oración: «Conviértete y cree en el evangelio».
Según explica el sitio web catholic.net, al igual que la mayoría de las tradiciones católicas, su origen está ligado al judaísmo. En la antigüedad, estos tenían por costumbre cubrirse con cenizas cuando habían pecado o se preparaban para una fiesta importante. Era un símbolo “de su deseo de conversión de su mala vida a una vida con Dios”, se detalla en el portal web.
La iglesia católica adoptó esta práctica y, al principio, solo los “penitentes que comenzaran su penitencia pública” recibían la ceniza. El origen de las cenizas proviene de flores incineradas del Domingo de Ramos del año anterior que en esa fecha se conservan para esta actividad.
El portal también describe que el ayuno consiste en hacer una sola comida fuerte al día, mientras que la abstinencia se basa en no comer carne. La abstinencia es obligatoria a partir de los 14 años y, el ayuno, de los 18 a los 59 años. Los católicos entienden que, mediante estos sacrificios, se purifican y piden “perdón a Dios por haberlo ofendido”.
¿POR QUÉ SE ESTABLECE EN ESTA FECHA?
De acuerdo al calendario litúrgico esta marca la Pascua de Resurrección como el primer tercio del año que coincide con la primera luna llena de la primavera. Esta fase del satélite terrestre no llega este año hasta el 5 de abril (Miércoles Santo), por lo que el primer domingo por detrás queda consignado como Domingo de Resurrección (esta fiesta no es movible, por lo que se sigue esta regla lunar).
Siete días antes es el Domingo de Ramos y marca el arranque de la Semana Santa. Al descontar 40 días de la Cuaresma, marcan el 22 de febrero como Miércoles de Ceniza.
Cuéntanos: ¿Qué representa para ti la Semana Santa?