Hay personas que de un día para otro deciden dejar esta mala práctica y hay otros que utilizan recursos de abstinencia, pero no existe una manera ideal de dejar el hábito del tabaco. Si tú has decido darle un giro saludable a tu vida, los expertos recomiendan comenzar gradualmente, por ejemplo, reducir el número de cigarrillos que fumas al día.
De esta manera tu cuerpo se puede adaptar al cambio y a la cantidad de nicotina que hay en el organismo. ¿Cómo saber si eres adicto a este componente? La adicción se caracteriza por la búsqueda compulsiva de la droga aún si eres consciente de las repercusiones negativas para tu salud.
Según los estudios científicos, de las personas que se proponen dejar de fumar, solo el 6% alcanza esta meta, por lo que deja en evidencia que el resto del porcentaje no encuentra formas efectivas para dejar el cigarrillo.
Las repercusiones de la nicotina en el organismo son peligrosas, hay consecuencias inmediatas y otras que se desarrollan a largo plazo. Aparte de crear dependencia, el humo del tabaco contiene monóxido de carbono que pasa a la sangre a través de los pulmones, también es responsable del daño en el sistema vascular y disminuye la transportación de oxígeno a los tejidos del organismo.
En LH Bienestar te presentamos algunos consejos avalados por el Dr. Patrick Bigaouette, psiquiatra del Sistema de Salud de Mayo Clinic en Mankato, Minnesota, para comenzar el camino libre del tabaco:
REDUCE DE A POCO EL CONSUMO
Estás por buen camino, si tienes la idea de dejar de fumar. Plantea en qué ocasiones específicas sueles hacerlo, por ejemplo: cuando estás nervioso, mientras tomas una taza de café, antes de dormir, etc.
Puedes empezar, por abstenerte de probar el cigarrillo en algunos de los tiempos en los que estás acostumbrado a hacerlo y lo puedes reemplazar por otra actividad. Por ejemplo, si estás acostumbrado a fumar antes de dormir, puedes reemplazar esa rutina por leer tu libro favorito antes de dormir.
REALIZA TU LISTA DE RAZONES
¿Por qué quieres dejar de fumar? En esta lista puedes elegir los beneficios que te aporta a corto plazo. Después de escribir tus razones, puedes fijar una fecha en la que dejarás de hacerlo por completo.
Informa a tus amigos y familiares de tu decisión, para que te apoyen en esta situación, así como en el proceso, sobre todo cuando estés malhumorado.
LIMPIEZA
De ser posible realiza limpieza completa de los lugares donde sueles fumar, si es tu casa o apartamento; puedes empezar a limpiar todo lo que huela a humo como ropa, muebles, adornos, alfombras, etc. Si se trata de tu automóvil, puedes hacer el lavado de las alfombras, sillones, etc.
Así mismo, elimina artículos que te recuerden el cigarrillo, por ejemplo, quita de tu vista el recipiente de las colillas, encendedores u otros.
IMPLEMENTA NUEVAS ACTIVIDADES
Si has evaluado que cuando permaneces solo eres más propenso a fumar, puedes ocuparte en otras actividades.
Involúcrate en actividades que ocupen tus manos y tu mente, debes tomar en cuenta que no deben ser agotadoras ni engordadoras. Por ejemplo, tocar tu instrumento favorito, teje, resolver crucigramas, jugar solitario.
CAMBIA TU ESTILO DE VIDA
Emplear una rutina te hará más disciplinado y establecer horarios. Come a horas diferentes, consume snacks saludables después de comer, por ejemplo, varitas de apio, zanahoria u otro vegetal. Las gomas de mascar sin azúcar pueden ser una buena opción.
FORMA UN SISTEMA DE APOYO
Busca a otras personas que quieran dejar de fumar al igual que tú, únete a una red social, un grupo de apoyo en línea o encuentra asesoramiento para que te ayuden a afrontar los desencadenantes, la abstinencia y los desafíos emocionales.
Finalmente, recuerda que todo es un proceso, no puedes compararte con otras personas que han dejado el hábito de la noche a la mañana. Lo más aconsejable es que visites a tu médico para evaluar los daños del cigarrillo en tu organismo y si es necesario puedas medicarte para erradicar algún daño.
Cuéntanos: ¿Conoces alguna otra manera de dejar de fumar?
