
La partida de «La Reina del Pueblo», Paquita la del Barrio, una de las voces más icónicas de la música mexicana, ha conmovido a fanáticos y colegas de la industria. Entre los mensajes de despedida, destacó el del cantautor guatemalteco Ricardo Arjona, quien expresó su tristeza y admiración por la artista a través de sus redes sociales.
UN ADIÓS CARGADO DE EMOCIÓN
Arjona, reconocido por su poesía hecha canciones, utilizó su cuenta de Instagram para rendir homenaje a Paquita, con quien compartió escenario y música. Publicó en historias un fragmento del videoclip de la canción que grabaron en 2008, «Ni tú ni yo», donde ambos unieron sus inconfundibles estilos. Junto al video, escribió un mensaje que reflejaba su cariño y respeto por la cantante:
«Este inútil que fue tu amigo te va a extrañar. Porque fuiste raza de uno y un chispazo de autenticidad entre tanta falsedad. Le harás falta a la música mexicana y mucho más a los que te queremos».
Sus palabras resonaron entre los seguidores de ambos artistas, quienes recordaron la gran química y complicidad que compartieron, a pesar de que, en un inicio antes de llevar a cabo esta colaboración, Paquita ni siquiera tenía idea de quién era Arjona, ni había escuchado su música antes, según una entrevista que el guatemalteco brindó hace algunos años.
Ese primer encuentro marcó el inicio de una relación de respeto y admiración mutua. Arjona siempre valoró la autenticidad de Paquita, su voz inconfundible y su compromiso con la música.
UN LEGADO IMBORRABLE
Paquita la del Barrio, cuyo verdadero nombre era Francisca Viveros Barradas, dejó una huella profunda en la música ranchera con sus letras llenas de empoderamiento y su inconfundible estilo. Con éxitos como «Rata de dos patas», «Me saludas a la tuya» y «Cheque en blanco», se convirtió en un ícono de la música popular mexicana.
Su partida representa el final de una era, pero su legado perdurará en cada canción, en cada frase mordaz y en el cariño de quienes la admiraron. Ricardo Arjona, al igual que miles de seguidores, lamenta su ausencia y la despide con el cariño y la admiración que solo un verdadero amigo podría expresar.
Sin duda hoy la música mexicana pierde una voz, pero gana una leyenda.
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