POR BEN FINLEY y JONATHAN DREW
ELIZABETH CITY, Carolina del Norte, EE. UU.
Agencia AP
El reverendo Al Sharpton hizo un llamado enérgico a la transparencia y la difusión de las imágenes de la cámara corporal ayer, durante el funeral de Andrew Brown Jr., un afroestadounidense que murió baleado por policías en Carolina del Norte, donde el activista por los derechos civiles comparó la retención de las imágenes con un engaño al público.
«Reconozco un engaño cuando veo uno. Difundan la cinta completa y dejen que la gente vea lo que le sucedió a Andrew Brown», exigió Sharpton ante los dolientes en un encomio acalorado en el servicio, al que se accedió sólo con invitación, en una iglesia en Elizabeth City.
«No se necesita tiempo para dar a conocer un video. ¡Revélenlo! Dejen que el mundo vea lo que hay que ver. Si no tienen nada que ocultar, ¿entonces qué esconden?», indicó.
La semana pasada, un juez determinó que el video no sería revelado por otro mes a la espera de una investigación de las autoridades estatales sobre el incidente del 21 de abril en el que murió Brown, un hombre de 42 años que fue baleado por policías mientras intentaban ejecutar órdenes de registro y arresto relacionadas con drogas.
Una necropsia independiente comisionada por su familia concluyó que Brown recibió cinco disparos, entre ellos uno en la nuca. El incidente desató protestas por varios días en la ciudad ubicada en la zona rural del noreste de Carolina del Norte.
Entre los oradores se encontraron los hijos de Brown y el abogado defensor de derechos civiles Ben Crump, quien representa a la familia de Brown. Al describir la muerte de Brown como un «tiroteo injustificable e imprudente», Crump dijo a los dolientes que el equipo legal seguirá luchando por la justicia y la transparencia.
«Nos encontramos aquí para exigir justicia por la muerte injustificada de Andrew, como la de muchos hombres de raza negra en Estados Unidos, que han sido asesinados, baleados por la espalda. Baleados mientras se alejan de la policía. Y dado que Andrew no puede exigir justicia, depende de nosotros hacerlo», afirmó Crump.
Muchos de los dolientes que hicieron una larga fila para entrar a la iglesia vistieron camisetas blancas con la imagen de Brown y la frase «Di su nombre». En el vestíbulo, una corona de flores blancas y rojas con un listón con el mensaje «Descansa en paz, Drew», en referencia al apodo de Brown, se encontraba junto a un tapiz con imágenes de él.
Miembros de la familia han dicho que Brown era un orgulloso padre de siete hijos, conocido por divertir a los parientes con sus relatos y chistes.
El reverendo Dwight Riddick, un pastor de la iglesia bautista Getsemaní en Newport News, Virginia, dijo que había acudido para manifestar su apoyo a la familia y a la causa contra la muerte de afroestadounidenses a manos de la policía.
«Hemos visto a demasiados hombres afroestadounidenses perder la vida a manos de policías e incluso a manos de otros afroestadounidenses. Queremos ver que acabe la violencia de ambas partes», sostuvo Riddick, de 63 años.