El primer ministro de Japón, Yoshihide Suga, hace declaraciones a la prensa. Foto La Hora/Rodrigo Reyes Marín/Foto compartida vía AP.

Por MARY YAMAGUCHI
TOKIO
Agencia AP

Japón extendió un estado de emergencia por el coronavirus a otras siete prefecturas, afectando a más de la mitad de la población en medio de un aumento de las infecciones en el país.

El primer ministro Yoshihide Suga también señaló que Japón suspenderá las exenciones de acceso rápido a visitantes de negocios y a otras personas que tienen permisos de residencia, prohibiendo totalmente la llegada de visitantes extranjeros mientras el estado de emergencia esté en vigor.

Hace unos días Suga declaró el estado de emergencia para Tokio y tres prefecturas cercanas. La nueva declaración, que incluye a otras siete prefecturas en el oeste y centro de Japón, entra en vigor el jueves y durará hasta el 7 de febrero.

«La dura situación continúa, pero estas medidas son indispensables para revertir las cosas y que haya una mejoría», declaró Suga en conferencia de prensa, inclinando la cabeza en un intento por obtener la comprensión del público.

Dijo que puso las siete prefecturas en zonas urbanas bajo el estado de emergencia para impedir que las infecciones se desborden hacia ciudades más pequeñas, donde los sistemas médicos son más vulnerables.

El gobierno ha solicitado a bares y restaurantes en las prefecturas de Osaka, Kioto, Hyogo, Fukuoka, Aichi, Gifu y Tochigi que cierren a las 8 de la noche, que los empleadores tengan al 70% de su personal trabajando desde casa y los residentes en las zonas afectadas no salgan salvo para cosas esenciales.

Suga ha sido criticado por su lenta reacción cuando las infecciones y muertes por coronavirus se duplicaron en el último mes a aproximadamente 300.000 y 4.100 respectivamente. Declaró ambos estados de emergencia sólo después de que autoridades locales se lo solicitaran.

Los expertos han advertido que incluso las declaraciones de emergencia, que no son vinculantes y dependen principalmente de la cooperación voluntaria, podrían ser insuficientes para disminuir los contagios considerablemente.

A diferencia de una emergencia inicial de siete semanas que Japón adoptó en abril y mayo del año pasado, las escuelas, los gimnasios, los teatros y las tiendas permanecerán abiertas.

Suga ha enfrentado críticas por no aplicar medidas de gobierno suficientemente enérgicas previamente durante la pandemia. Principalmente limitó sus intervenciones a pedirle al público que adoptara medidas básicas de seguridad como el uso de mascarillas, el lavado de manos y evitar beber y comer en grupos hasta mediados de diciembre, cuando finalmente anunció la suspensión de una campaña de turismo interno de financiación gubernamental.

Artículo anteriorMcConnell rechaza juicio político rápido contra Trump
Artículo siguienteTribunal acepta denuncia de Ucrania por abusos en Crimea