MADRID
Agencia DPA/Europa Press
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha promulgado la ley federal que extiende las garantías de inmunidad a los expresidentes rusos y su familia.
En virtud de esta nueva ley, publicada en el portal oficial de información jurídica, una vez terminado su mandato, el Presidente gozará de inmunidad judicial o administrativa, no podrá ser llevado a los tribunales ni ser detenido, arrestado, sometido a registro o interrogado.
También quedan garantizadas todas sus posesiones, incluidas residencias, despachos, vehículos de transporte, documentos que le pertenecen y correos, según informa la agencia de noticias Sputnik.
Además, la ley estipula que la inmunidad no solo abarcará las acciones llevadas a cabo durante el mandato presidencial, sino independientemente de este. Dicha inmunidad solo le podrá ser retirada por el Consejo de la Federación (Senado) en caso de que la Duma (Cámara Baja) presente contra él cargos de alta traición u otro delito grave confirmado por el Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional.
Hasta ahora, el comité investigador tenía la potestad de presentar cargos contra un expresidente, los cuales eran remitidos a continuación a la Duma, que daba su consentimiento, y luego la cuestión era revisada por el Consejo de la Federación.
Putin, que llegó al poder en el año 2000 y ha ocupado la Presidencia durante todo este tiempo, salvo el paréntesis entre 2008 y 2012, consiguió sacar adelante el pasado 1 de julio en referéndum una reforma constitucional que le permitirá gobernar el país hasta 2036, si se presenta a las dos siguientes elecciones.