Por DARIA LITVINOVA
MOSCÚ
Agencia AP
Rusia negó ayer que realizó varios por intentos por envenenar al opositor Alexei Navalny o que sus fuerzas de seguridad tuvieron participación en la reciente intoxicación del dirigente.
El ministro de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, afirmó que su país «ya está acostumbrado» a que los países occidentales lancen acusaciones contra Rusia en la prensa.
«Es entretenido leer estos artículos, pero la manera en que son redactados revela sólo una cosa: que los países occidentales carecen de toda ética y de toda destreza diplomática y que se resisten a respetar las leyes internacionales en cuanto a la publicación de hechos verídicos», indicó Lavrov en conferencia de prensa tras reunirse con su par croata en Zagreb, la capital de Croacia.
Navalny se enfermó el 20 de agosto cuando estaba en un vuelo interno en Rusia, y fue llevado en coma a un hospital de Alemania. Laboratorios en Alemania, Francia y Suecia, además de pruebas de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas, determinaron que el líder opositor fue víctima de un ataque con una sustancia neurotóxica fabricada en la era soviética y llamada Novichok.
Navalny y sus allegados han acusado varias veces al Kremlin de estar detrás del atentado.
El lunes, el grupo investigativo Bellingcat y la emisora rusa The Insider publicaron un reporte según el cual agentes de la agencia de seguridad rusa FSB siguieron a Navalny durante sus viajes en el 2017, «recibieron entrenamiento en armas químicas, sustancias químicas y medicina» y «estaban cerca del activista opositor en los días y horas previos a su envenenamiento».
La investigación, realizada por Bellingcat y The Insider en colaboración con CNN y Der Spiegel, identifico a los supuestos agentes del FSB y a laboratorios químicos tras analizar datos telefónicos y datos de vuelos. Mencionó dos ocasiones en el 2019 y el 2020 en que Navalny y su esposa Yulia sufrieron síntomas nunca esclarecidos.
«Este caso está resuelto, yo sé quiénes trataron de matarme», escribió Navalny en su blog poco antes de la publicación del artículo.
Navalny, quien está convaleciendo en Alemania, escribió que sus allegados han confirmado los datos publicados en el artículo, y nuevamente acusó al presidente ruso Vladimir Putin de haber ordenado el atentado.