MADRID
Agencia DPA/Europa Press
Al menos nueve personas han muerto, entre ellas dos niños, y los servicios de emergencia buscan a más de una treintena de desaparecidos por un deslave en El Salvador que ha sepultado unas 60 viviendas en la localidad de Nejapa, cerca de la capital, según el último balance ofrecido por las autoridades.
El alud de tierra y lodo, provocado por las fuertes lluvias caídas en la zona en las últimas horas, se extiende por unos cuatro kilómetros. Los servicios de Protección Civil y de Bomberos, desplegados en el lugar, han recuperado ya nueve cadáveres, según los últimos datos ofrecidos por la Fiscalía del país.
«En este momento estamos concentrados absolutamente en la búsqueda y el rescate de los 35 desaparecidos», ha asegurado el ministro de Gobernación, Mario Durán, quien se ha desplazado a la zona, tras informar de que la Policía salvadoreña ya está efectuando una investigación para esclarecer los motivos que han provocado el corrimiento.
«Continuamos buscando y no perdemos las esperanzas de encontrar personas con vida», ha afirmado, precisando que «son cerca de mil elementos desplegados que han empezado a trabajar en diferentes áreas priorizando la búsqueda y rescate». Estos efectivos llevan más de 17 horas en las labores de búsqueda de los desaparecidos.
Protección Civil ha declarado la alerta roja para el municipio, particularmente en la zona del caserío Angelitos 1 y 2 y en sus zonas aledañas para que las autoridades realicen las labores de búsqueda, rescate, recuperación y asistencia humanitaria pertinentes.
Asimismo, la declaración busca «disponer de todos los recursos» necesarios para atajar la situación. Según ha trasladado Durán, en las labores de búsqueda, a las que también se ha unido personal penitenciario, participan «más de mil personas».
«No se escatiman esfuerzos para salvar las pertenencias y la vida de los pobladores», ha asegurado.
De forma paralela, Protección Civil ha solicitado a la población no transitar la carretera que une San Salvador con Quezaltepeque y que, en su lugar, se busquen vías alternativas.
Hasta el lugar de la tragedia también ha llegado el ministro de Defensa, René Merino Monroy, mientras que, con el amanecer, los servicios de emergencia han comenzado a actuar con maquinaria y han llegado también unidades caninas del Ejército y de la Policía.
«Gracias, ministro. Sé que son las 3 de la mañana y que todos están cansados, pero estas familias nos necesitan», ha publicado el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, en su cuenta de Twitter, en referencia a Durán. «Dios nos usará de instrumento para salvar vidas», ha añadido.
Por su parte, la ministra de Vivienda de El Salvador, Michelle Sol, ha informado de que los habitantes de la zona, que cuentan con apoyo sanitario y psicológico, dispondrán de una alternativa habitacional. «No pueden pasar esta noche aquí», ha señalado.
Tal y como ha detallado Durán, se han habilitado dos albergues y se habilitará uno más en las próximas horas. También se garantizará la alimentación de las familias afectadas por el deslave.
EL ALCALDE, SEÑALADO
Los residentes han responsabilizado al alcalde de Nejapa, Adolfo Barrios, miembro del FMLN, de lo ocurrido, acusándole de negligencia al haber permitido que quedara bloqueada una quebrada que sería la que habría provocado el deslave de la pasada noche como resultado de las lluvias.
En este sentido, Barrios ha denunciado en declaraciones a los medios que el ministro de Gobernación no ha querido reunirse con él y le ha acusado de ser el responsable de la tragedia. El alcalde ha asegurado que incluso el equipo de protección del ministro le ha amenazado con sus armas.
Así las cosas, ha denunciado que «esto se aprovechó para un show, aprovechándose del dolor de los familiares que he perdido en esta tragedia». «Yo quiero hacer un llamado a la reflexión al señor presidente de la República, al ministro de Gobernación, a la ministra de Salud a que nos apoyen, que nos unamos, que en estos momentos no es necesario estar pensando ideológicamente», ha defendido.
«El pueblo está sufriendo una tragedia y necesita del comportamiento de altura que tanto los gobiernos municipales como el gobierno central deben tener», ha sostenido Barrios, en declaraciones recogidas por ‘La Prensa Gráfica’.
Sin embargo, el fiscal general del país, Raúl Melara, ha anunciado este viernes que se ha abierto una investigación sobre el corrimiento de tierra para «aclarar las circunstancias que provocaron el deslave que soterró parte de la colonia Angelitos 2».
Melara ha detallado que la investigación es una colaboración entre la Fiscalía, el Ministerio de Medio Ambiente, la División de Medio Ambiente de la Policía Nacional Civil y el Cuerpo de Bomberos.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales había advertido el jueves ante la posibilidad de desplazamientos de tierra por las fuertes lluvias El Picacho, Boquerón y municipios aledaños, mientras que la prensa local señala que las investigaciones preliminares de los geólogos apuntan a que la causa del fatal desenlace fue que «se represó el material de manera natural» a causa de las fuertes lluvias.
No obstante, vecinos de la zona aseguran que el colapso ha sido debido al taponamiento de la quebrada Villalona por una empresa cañera, que propició la acumulación y posterior desborde de una corriente de lodo, rocas, árboles y escombros.
Al respecto, Durán ha añadido que «la Policía va a hacer las inspecciones para determinar si como apuntan algunos vecinos ahí se dio una especie de canal que empezó a obstruir el agua y después se destapó de una manera torrencial».
El servicio de Protección Civil del país ha emitido una advertencia por la continuación de lluvias de fuerte intensidad en la franja norte del país y cordillera volcánica.