Por REBECCA SANTANA y STACEY PLAISANCE
ABBEVILLE, Luisiana, EE. UU.
Agencia AP
Las ventanas tapiadas y las aceras vacías hacían que partes de la región de Acadiana, en Luisiana, pareciesen escenarios de película vacíos mientras el huracán “Delta” seguía acercándose a la costa del golfo en su aparente ruta hacia la misma región del suroeste que ya fue golpeada por Laura hace seis semanas.
Según los meteorólogos, “Delta” — el 25to meteoro con nombre en una temporada sin precedentes en el Atlántico — podría llegar a la costa el viernes en la noche en algún punto de la costa suroeste de Luisiana. La duda es si mantendrá la categoría 3, con los fuertes vientos de 195 km/h (120 mph) que tenía en la madrugada del viernes o si perderá fuerza justo antes de tocar tierra a un meteoro, todavía peligroso, de categoría 2.
De cualquier forma, esta azotada región costera se toma la amenaza de “Delta” muy en serio.
«Se puede conseguir otra casa y otro auto, pero no otra vida», dijo Hilton Stroder mientras él y su esposa Terry tapiaban las ventanas de su vivienda de Abbeville con planchas antes de marcharse a la casa de su hijo, más al este.
Mientras “Delta” avanzaba hacia el norte a 19 km/h (12 mph) en la mañana del viernes, el Centro Nacional de Huracanes mantenía su advertencia por huracán en la costa del golfo, desde High Island, Texas, a Morgan City, Luisiana.
Esta es la sexta vez esta temporada que Luisiana se ve amenazada por tormentas tropicales o huracanes. Uno se desintegró en el extremo sureste del estado y otros se desviaron hacia otros lugares, pero la tormenta tropical “Cristóbal” causó daños en el sureste en junio. Y “Laura” arrasó gran parte del suroeste el 27 de agosto dejando más de 30 fallecidos.