ROMA
Agencia DPA/Europa Press
El Papa publicará su exhortación apostólica “Querida Amazonia”, en la que el Pontífice valorará si permite la ordenación de “viri probati” -hombres de fe probada y relevantes para la comunidad, aunque tengan familia estable- para garantizar los sacramentos en los lugares más remotos de la región. La propuesta fue aprobada por una amplia mayoría de los obispos participantes en el Sínodo de la Amazonia el pasado otoño.
Con la exhortación que se conocerá la próxima semana, y de la que hoy se ha desvelado su título, Francisco también valorará el acceso de las mujeres a ministerios laicos, como el lectorado o el acolitado, así como la creación del ministerio de «la mujer dirigente de la comunidad». Igualmente, con este documento quiere sentar las bases y los caminos para que la Iglesia emprenda una verdadera conversión a la ecología integral.
Según ha informado el Vaticano, en la presentación intervendrá, además del secretario general del Sínodo de Obispos, cardenal Lorenzo Baldisseri; el subsecretario para la Sección de migrantes y Refugiados del Vaticano y secretario especial del Sínodo, cardenal Michael Czerny. También estarán presentes el teólogo de la Universidad Gregoriana el padre Adelson Araújo dos Santos; la monja Augusta de Oliveira, vicaria general las Siervas de María Reparadora; y el científico brasileño y Premio Nobel de la Paz en 2007, Carlos Nobre. Además, intervendrá a través de vídeo el obispo del Vicariado amazónico de Puerto Maldonado y el secretario especial del Sínodo de los Obispos de la región Pan-amazónica, David Martínez.
La nueva exhortación apostólica de Francisco tendrá en cuenta el documento aprobado por 169 obispos en el Sínodo de la Amazonia celebrado el pasado otoño, aunque el texto no tiene valor vinculante.
En ese documento, los prelados subrayaron que el celibato es un «don de Dios» pero reconocían las dificultades de las comunidades eclesiales en el territorio amazónico para acceder a la Eucaristía. También se hace constar que, durante las disuasiones del Sínodo, algunos obispos se pronunciaron a favor de «un abordaje universal del tema». Este punto fue apoyado por 128 votos a favor y 41 en contra y fue, pese a su aprobación, el que más rechazo suscitó de los 120 que se votaron.
Por otro lado, los obispos señalaban la «urgencia» de conferir ministerios para hombres y mujeres «de forma equitativa» en esa región, así como reconocer el liderazgo femenino «reforzando su participación en los consejos pastorales de parroquias y diócesis, o incluso en instancias de gobierno».
COMISIÓN PARA EL DIACONADO FEMENINO
En todo caso, en relación al diaconado femenino, el texto de los obispos recordaba un alto número de consultas que solicitaron el diaconado permanente para la mujer. Sin embargo, señalaba que el Papa creó en 2016 una Comisión sobre el diaconado femenino que llegó a un «resultado parcial» sobre cómo era la realidad del diaconado de las mujeres en los primeros siglos de la Iglesia y sus implicaciones hoy. En este punto, se mostraban a favor de compartir sus experiencias y reflexiones con la Comisión y esperaban resultados.
El propio Pontífice reconoció, en el discurso final del Sínodo, que el documento se «queda corto» en el tema de las mujeres y ya anunció que volverá a convocar la comisión sobre diaconado femenino. «Recojo el guante de que las mujeres sean escuchadas», señaló.
PECADO ECOLÓGICO
Otros temas propuestos en el documento del Sínodo que ha valorado el Papa para su exhortación apostólica son la elaboración de un rito amazónico o la necesidad de definir el pecado ecológico. Esta última petición no es un nuevo dogma ya que el Catecismo de la Iglesia Católica lo contempla en varios artículos, del 340 al 344, pero los obispos insisten en crear «ministerios especiales» para la promoción de la ecología integral «a nivel parroquial y en cada jurisdicción eclesiástica».
Además, los prelados pusieron el acento en la necesidad de que la Iglesia lleve a cabo «una conversión a la experiencia sinodal». «Es necesario fortalecer una cultura de diálogo, de escucha recíproca, de discernimiento espiritual, de consenso y comunión para encontrar espacios y modos de decisión conjunta y responder a los desafíos pastorales», recalcaban.
‘VIRI PROBATI’ Y CELIBATO SACERDOTAL
Pese a la multitud de temas abordados durante el Sínodo, el que más ha trascendido es el de la ordenación de los ‘viri probati’ y su incidencia en el celibato sacerdotal, que tiene defensores y detractores dentro de la Iglesia. La polémica más reciente surgió a raíz del anuncio de la publicación de un libro escrito ‘a cuatro manos’ entre el prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, el cardenal Robert Sarah y el papa emérito Benedicto XVI.
En un fragmento del libro ‘Desde lo más profundo de nuestros corazones’, Benedicto XVI señalaba que «el celibato es indispensable». Sin embargo, poco después del anuncio, el arzobispo Georg Gänswein, secretario privado del Papa emérito, explicó que Benedicto XVI había pedido retirar su firma del libro porque no sabía que sus manifestaciones se iban a convertir en un volumen.
Precisamente, esta semana el Vaticano ha aclarado que la ausencia de Gänswein en audiencia pública con el Papa Francisco se debe a una «ordinaria redistribución de sus tareas», aunque no ha especificado el motivo de esa redistribución.
La polémica surgió no tanto por la tesis defendida por el papa emérito sino por el momento de la publicación del libro de Sarah, cercano a la aparición de la exhortación apostólica de Francisco en la que se valorará la ordenación de los ‘viri probati’ para regiones remotas de la Amazonia. El propio Papa Francisco se ha mostrado en diversas ocasiones a favor del celibato sacerdotal.
La última vez que lo ha hecho es en el libro ‘San Giovani Paolo Magno’ (Editoriale San Paolo), que se publicará en Italia sólo un día antes de la exhortación apostólica, el martes 11 de febrero. Se trata de un libro-entrevista escrito por el sacerdote italiano Luigi Maria Epicoco que recoge reflexiones de Francisco sobre San Juan Pablo II y cuenta con una recopilación de fragmentos autobiográficos inéditos.
En el texto, al que ha tenido acceso Europa Press, el Pontífice defiende el celibato como «gracia decisiva» de la Iglesia católica latina y asegura que está en plena coincidencia con la visión sobre el sacerdocio de Juan Pablo II. Francisco enfatiza su convicción de que «el celibato es un regalo, una gracia».
«Caminando tras los pasos de Pablo VI, de Juan Pablo II y de Benedicto XVI siento el deber de pensar que el celibato es una gracia decisiva que caracteriza el Iglesia católica latina», manifiesta. En todo caso, precisa que «es una gracia» y «no es un límite». Asimismo, rechaza, en sintonía con el Papa Wojtyla, el sacerdocio femenino.